La junta directiva del Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña, “ante la gravedad y reiteración de los hechos”, aprobó por unanimidad la expulsión provisional de la institución del doctor Emilio González Fernández, tras ser condenado por el Juzgado de lo Penal número 2 de Santiago como autor de un delito de abusos sexuales continuados a una paciente, que el propio acusado admitió ante los tribunales de justicia.
El expediente ha sido trasladado a la Comisión de Ética y Deontología del Colegio para que emita su obligado dictamen, que puede desembocar en la expulsión definitiva del citado colegiado. La expulsión trae consigo la prohibición absoluta del ejercicio por vida de la medicina y la pérdida de los derechos inherentes a la colegiación. Para la junta directiva, “su reiterado comportamiento no es acorde a los valores éticos y deontológicos de la profesión médica”, señalan en el comunicado que emitieron en la jornada de ayer.
La Fiscalía pedía una pena de tres años de cárcel y una multa de 5.000 euros para el conocido psiquiatra compostelano, que fue juzgado por un supuesto delito de abusos sexuales a una paciente. Tras reconocer los hechos, Emilio González Fernández aceptó un año y nueve meses de cárcel y pagar 6.000 euros a la víctima.
Muy conocido en la capital gallega, ya fuera condenado en 2003 por abusar sexualmente de otra paciente. Durante la investigación llevada a cabo por el Juzgado de Instrucción número 1 de Santiago, también declararon otras testigos que presuntamente han sido víctimas de este psiquiatra, cuyo modus operandi sería supuestamente siempre el mismo: aprovecharse de personas vulnerables a las que diagnostica de un proceso depresivo.
Emilio González Fernández tiene en la actualidad 78 años, y pese a que ya fuera condenado en 2003 siguió ejerciendo, tanto en su consulta privada, situada en la rúa do Hórreo, como en el ambulatorio Concepción Arenal.
Médico especialista en Psiquiatría y doctor en Antropología Social, de 1970 a 1975, fue jefe clínico del Psiquiátrico de Conxo. Fue, además, profesor asociado de Psiquiatría de la Facultad de Medicina de la USC, psiquiatra del Hospital Clínico de Santiago y miembro de la Sección de Etnomedicina del Museo do Pobo Galego.