El Banco de España prevé una caída del PIB de hasta el 15,1% si hay un fuerte rebrote del virus este año

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Las nuevas proyecciones mejoran el cálculo menos adverso, pero agravan el más extremo | La entidad prevé que la tasa de paro se sitúe este año entre el 18,1% y el 19,6%, aunque llegaría al 23,6% en el peor caso

El Banco de España va acotando su previsión de hundimiento del PIB en este 2020 marcado a fuego por la crisis del coronavirus. Si hace un mes y medio, cuando la desescalada aún se veía lejana y la herida económica aún era difícil de calcular en toda su extensión, el supervisor proyectaba un desplome económico de entre el 6,6% y el 13,6%, este lunes sus técnicos han reducido el rango a entre el 9% y el 11,6%, aunque con una salvedad: un escenario extremo que llevaría el desplome hasta el 15,1%. Eso significa que la economía retrocederá en un solo ejercicio tanto como en toda la Gran Recesión, cuando en seis años se perdieron nueve puntos y medio del PIB. La salida también queda más delimitada: el año que viene la economía debería rebotar a una tasa bastante “robusta” —entre un 7,7% y un 9,1%, salvo en el escenario de cola, en el que se quedaría en el 6,9%—, con una recuperación completa de todo lo perdido que, en el caso más optimista, se produciría en 2022 y en el más pesimista, como muy pronto, en 2023. “En el mejor de los casos, la persistencia de la crisis será relativamente elevada y la uve de la recuperación, bastante asimétrica”, apuntan desde la Dirección General de Economía y Estadística del supervisor. “La caída va a ser muy grande y es bastante probable que en 2022 ni siquiera hayamos recuperado el nivel previo a la crisis. Nos va a llevar un tiempo”.

Las estimaciones recogidas en los dos principales escenarios, de recuperación temprana y gradual, suponen una mejora respecto a los últimos pronósticos presentados el 18 de mayo por el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, en el Congreso, que apuntaban a una merma del PIB de entre el 9,5% y el 12,4% este año, con una recuperación en 2021 insuficiente para alcanzar el nivel previo, registrando un avance económico de entre el 6,1% y el 8,5%, si bien el Banco de España afirma que la comparativa es «limitada» al haber variado la aproximación metodológica.

El Banco de España estima una fuerte disminución del PIB en el segundo trimestre, con una caída (sin precedentes) de entre el 16% y el 21,8%, debido a una incidencia del confinamiento más elevada que en el primer trimestre (-5,3%), si bien se prevé un repunte de la actividad en la segunda mitad del año y una recuperación gradual a posteriori. Para el tercer trimestre vaticina un repunte de entre el 16% y el 19,3%, que se moderaría a entre el 3% y el 6,3% en el cuarto trimestre.

La autoridad monetaria afirma que en España, donde el contagio ha alcanzado una magnitud «muy elevada», la reducción del PIB en 2020 superaría, en ambos escenarios, a la del área del euro en unos 3 puntos porcentuales, si bien la recuperación posterior en la economía española sería «más intensa» que la eurozona.

El organismo supervisor basa sus previsiones en dos principales escenarios, de recuperación temprana y gradual en función de posibles rebrotes y de la efectividad de las medidas, si bien apunta que en ambos la incertidumbre acerca del desarrollo de la enfermedad, que se mantendrá previsiblemente hasta entrado el próximo año, actuará como freno del gasto de hogares y empresas.

Bajo el escenario de recuperación temprana, el Banco de España asume que la mejoría de la actividad observada desde el tramo final del segundo trimestre prosigue con posterioridad sin que se registren nuevos obstáculos (de naturaleza sanitaria, económica o financiera) de envergadura relevante.

De esta forma, se presupone que los agentes económicos han adaptado su forma de prestación de servicios a las restricciones por las medidas de confinamiento, siendo las pérdidas de actividad menores que al inicio, se evitan rebrotes significativos y las medidas económicas logran evitar la destrucción de empresas y del stock de capital, con lo que hay un deterioro laboral transitorio, sin aumento del paro de larga duración.

Paro entre el 18% y el 19%

Con esta recuperación temprana el PIB español caería un 9% este año, y repuntaría un 7,7% y un 2,4%, respectivamente, en 2021 y 2022, al tiempo que se produciría un aumento de la tasa de paro desde el 14,1% del año pasado al 18,1% este año, para subir al 18,4% en 2021 y bajar al 17,1% en 2021.

A su vez, el déficit público subiría al 9,5% este año, escalaría al 5,8% el próximo ejercicio y bajaría al 4,8% en 2022, en tanto que la deuda pública alcanzaría el máximo del 114,5% del PIB este año, para bajar al 11,7% en 2021 y subir de nuevo al 112,5% en 2021, muy alejados del 95,5% con el que cerró en 2019.

Por su parte, en el escenario de recuperación gradual, se asume una incidencia sobre la actividad algo mayor de las medidas adoptadas para contener la pandemia en el segundo trimestre; además, no se descartan ni la posible aparición de nuevos brotes de la epidemia que, aunque de menor virulencia que el episodio original, pudieran llevar a la reintroducción de ciertas medidas de contención, ni el surgimiento de daños más persistentes en el tejido productivo.

En este escenario el PIB retrocedería en 2020 un 11,6%, y pasaría a crecer un 9,1% y un 2,1% en cada uno de los dos años siguientes, al tiempo que la tasa de paro subiría hasta un 19,6% de la población activa este año, para descender al 18,8% y al 7,4% los dos ejercicios siguientes.

Déficit entre el 9,5% y el 11,2%

En paralelo, el déficit público llegaría a situarse en el 11,2% este ejercicio, bajando al 6,8% y al 6,1% los dos siguientes, mientras que la deuda pública podría alcanzar incluso el 119,3% en 2020, disminuyendo al 115,9% en 2021 y volviendo a subir al 118,7% en 2022.

De cualquier forma, con al final del período de proyección, el nivel del PIB se situaría unos 0,5 puntos porcentuales por encima de sus registros previos a la crisis en el escenario de recuperación temprana, mientras que sería todavía inferior, en 1,6 puntos porcentuales, en el de recuperación gradual, con unas cifras de paro, déficit y deuda superiores a las anteriores a la pandemia.

Caída del PIB del 15,1% en el peor escenario

El Banco de España señala que la situación de «enorme incertidumbre» actual no permite descartar escenarios de riesgo más desfavorables. Por ello, ha construido un escenario «de recuperación muy lenta», que implícitamente incluye la posibilidad de episodios con repuntes sustanciales en el número de nuevas infecciones, que requerirían confinamientos estrictos adicionales. En este escenario de riesgo, el retroceso del PIB en 2020 alcanzaría el 15,1%, para crecer un 6,9% en 2021 y un 4% en 2022.

En el ámbito de los precios, el IAPC general continuaría mostrando ritmos de avance negativos hasta principios de 2021. En términos de las tasas medias anuales, espera que el IAPC general aumente desde el -0,1% en 2020, al 1,3% en 2021 y al 1,6% en 2022, en el escenario de recuperación temprana, y desde el -0,2 % hasta el 1,2% y el 1,5% en el de recuperación gradual.

Riesgos a la baja

La autoridad monetaria indica que los escenarios descritos se encuentran sometidos «a importantes riesgos a la baja» por la posibilidad de rebrotes de la enfermedad de cierta intensidad, que requirieran la reintroducción de medidas de contención, con el consiguiente impacto negativo sobre la actividad y el aumento de las tensiones de liquidez que deriven en problemas de solvencia, que serían más pronunciadas en las empresas más endeudadas.

Estas quiebras empresariales darían lugar a un aumento de la morosidad crediticia y a una destrucción del stock de capital y haría aumentar la probabilidad «de fenómenos de histéresis» en el mercado de trabajo, es decir, la persistencia de una tasa de paro elevada durante un largo tiempo.