Estados Unidos ha ordenado suspender los vuelos desde y hacia su territorio de aerolíneas chinas después de que Pekín no permitiera a compañías estadounidenses reanudar sus servicios a China durante la crisis del coronavirus.
En un comunicado, el Departamento de Transporte estadounidense afirma que la negativa del Gobierno chino a reiniciar el servicio de las aerolíneas americanas ha provocado el conflicto. «Aerolíneas estadounidenses pidieron reiniciar el servicio de pasajeros desde el 1 de junio. La negativa del Gobierno de China a aprobar esas solicitudes es una violación de nuestro Acuerdo de Transporte Aéreo», ha remarcado la administración estadounidense en el escrito.
Antes si Donald Trump lo ordena
La suspensión se aplicará desde el 16 de junio pero podría comenzar a regir antes si Donald Trump, presidente norteamericano, lo ordena durante la crisis sanitaria del coronavirus. El departamento también dijo que hay indicios de que habría aerolíneas chinas que utilizan vuelos charter para esquivar el limite de un vuelo por semana y así, aventajan a las compañías estadounidenses.
«Nuestra meta fundamental no es perpetuar esta situación sino un mejor ambiente en el que aerolíneas de los dos países puedan ejercer completamente sus derechos bilaterales», afirma el Departamento de Transporte estadounidense.
Un nuevo desencuentro
China y EE.UU arrastran una sucesión de enfrentamientos en los últimos meses. El coronavirus se ha convertido en el «caballo de batalla» de Donald Trump, presidente de los EE.UU, que acusa al gigante asiático de ocultar información de la enfermedad del coronavirus.
Las acusaciones de Trump van desde la ocultación de información sobre el coronavirus hasta el robo de documentos sobre la elaboración de una posible vacuna para la enfermedad. El presidente de los EE.UU llegó a contradecir a la CIA y asegurar que el coronavirus Covid-19 fue creado por China.
Donald Trump, presidente de EE.UU. llegó a referirse al coronavirus como «el virus chino». Durante una rueda de prensa en la Casa Blanca respondió a una periodista asiática «pregúntele a China» durante la pandemia.