el Rey Felipe VI quiso trasmitir nada más proclamarse monarca de España, en el 2014. Y con ese mismo, la Corona intenta vivir desde entonces. Una monarquía moderna, cercana, que apoya a los jóvenes y que está al lado de los ciudadanos. Por eso, este 2021, el Rey ha vuelto a apostar en su discurso de Navidad por aquellas primeras palabras dando prioridad a una estética y escenario más luminoso que de costumbre.
Desde la vestimenta hasta los cuadros que le rodeaban
Así, con este cambio de imagen, esa renovación de una Corona que venía dañada por las circunstancias que envuelven al Rey emérito, se mantiene y arriesga por una sala nueva. Menos tradicional e inédita -ha dado el discurso en una sala contigua al Salón de Audiencias-. Además, el traje que ha utilizado el monarca también da un aviso sobre ello. Sobrio pero moderno: el azul marino acompañado de una camisa blanca con rayas finas y una corbata con puntos en tonos rojo, azul y blanco, algo que ya había avisado La Zarzuela con anterioridad.
En esa misma línea, la decoración que le rodeaba: dos cuadros de arte contemporáneo de la colección de Patrimonio Nacional. Guiño a Cataluña, siendo una de estas obras del pintor catalán Albert Rafols Casamada y a las relaciones internacionales que viene forjando desde que comenzó su reinado, siendo la otra obra de la argentina Sarah Grilo.
La unión y la familia, ante todo
Además, acompasado con el mensaje de unión y familia que rezó durante sus doce minutos y medio (aproximadamente) de discurso, vemos varias fotos a su alrededor, con dos de ellas muy visibles. Una de la princesa Leonor, en su primer aparición con amigos este verano, y la otra de la familia real . Junto a estos, dos libros: la Constitución, por la que pidió respeto nada más comenzar su discurso, y otro referente de la cultura, «Biblioteca Nacional de España, 300 años haciendo Historia», a lo que también hizo alusión en sus palabras.
Explicando que, «no se quería alargar más», Felipe VI cerró el mensaje con un video de fotos de los monarcas en diversos escenarios junto a los españoles para resumir este 2021: con los afectados por la erupción de La Palma, con las víctimas del terrorismo o con deportistas españoles antes de partir a los Juegos Olímpicos de Tokio. Dos de estas imágenes, en solitario de sus hijas que buscaban no pasar desapercibidas. La primera, de la Infanta Sofía en su primer acto institucional en solitario y la segunda, del primer acto en solitario de la Princesa de Asturias (visita al Instituto Cervantes).
Con este último mensaje, aludiendo al futuro de la monarquía, el Rey también termina por hilar lo que a lo largo del discurso repitió con varias fórmulas distintas: confiar en nuestras fuerzas como Nación y buscar consensos políticos y sociales para garantizar una mayor estabilidad en nuestro país.