Un robo desde dentro con premeditación y acceso privilegiado
La Policía Nacional ha detenido en Ciudad Real a un hombre como presunto autor de un robo con fuerza cometido en el propio establecimiento en el que trabajaba, donde sustrajo una caja fuerte que contenía más de 33.500 euros en efectivo. La investigación, iniciada tras la denuncia del propietario del negocio, ha revelado un caso con evidentes indicios de premeditación y conocimiento interno del local.
Los agentes comenzaron sus pesquisas centrando las sospechas en un círculo reducido de personas con acceso a llaves y familiarizadas con la ubicación de la caja fuerte, ya que no se observaron signos de forzamiento en ninguna de las cerraduras del local.
Acceso por el portal comunitario y sabotaje de la seguridad
Gracias al análisis de las cámaras de videovigilancia, la Policía logró identificar al sospechoso. Las imágenes mostraban cómo uno de los empleados del negocio accedía al portal comunitario adyacente utilizando sus propias llaves. Desde allí, entraba al sótano del establecimiento, zona en la que se encontraba la caja fuerte.
Una vez dentro, el individuo actuó con rostro cubierto y roció las cámaras con spray para dificultar su identificación. Además, inutilizó la instalación wifi del establecimiento, en un intento de bloquear cualquier transmisión remota de las grabaciones. Culminó la operación saliendo por el mismo portal con un carrito que contenía la caja fuerte sustraída.
El botín escondido en un cubo de fregona
Tras la identificación y detención del presunto autor, la Policía Nacional logró recuperar la totalidad del dinero robado, un total de 33.572 euros. El efectivo estaba oculto en un insólito escondite: un cubo de fregona, que se encontraba dentro de un garaje propiedad del detenido.
Este hallazgo permitió a los agentes no solo resolver el caso con rapidez, sino también devolver al propietario del negocio la totalidad de lo sustraído, lo que representa un éxito operativo significativo en términos de eficacia policial.
Implicaciones legales y refuerzo de medidas de seguridad
El detenido deberá ahora responder ante la justicia por los cargos de robo con fuerza, agravado por el hecho de haber actuado desde una posición de confianza y con acceso privilegiado a las instalaciones.
Este caso pone de manifiesto la importancia de mantener protocolos de seguridad actualizados, incluso dentro de los propios equipos de trabajo. Desde la Policía Nacional se insiste en la necesidad de revisar periódicamente los accesos físicos y digitales a zonas sensibles, así como de monitorizar conductas sospechosas, incluso entre empleados habituales.