Trabajadores de la UTE Ambulancias Cuenca, adjudicataria del transporte sanitario en la provincia; representantes del Comité de Empresa y organizaciones sindicales se han concentrado a las puertas del hospital ‘Virgen de la Luz’ de Cuenca para reclamar a la empresa que cumpla los estipulado en el nuevo convenio colectivo e instar al SESCAM a que haga cumplir dicho convenio o, de lo contrario, que sea rescindida dicha adjudicación.
Aunque en el resto de las provincias de la región estas concentraciones han sido aplazadas, en Cuenca sí se ha mantenido – según los sindicatos- debido a la ausencia de diálogo de la empresa.
En el manifiesto que han leído a las puertas del complejo hospitalario conquense, denuncian que se les sigue aplicando un convendio colectivo «obsoleto, precario y en ultractividad desde diciembre de 2014». A ello, dicen, se suman los inclumplimientos llevados a cabo por la concesionaria actual relativos a salarios, cuadrantes del transporte programado a «abuso» de trabajadores con contratos en prácticas.
Acusan a la empresa de obtener más rentabilidad económica a costa de devaluar las condiciones laborales de los trabajadores con la «permisividad» de la administración pública que, añaden, se niega a aplicar «medidas sancionadoras de rescate de un servicio público». «Si las empresas no son capaces de cumplir, que el SESCAM asuma una gestión directa», apostillan.
Si no reciben ningún tipo de respuesta, avanzan que irán a una huelga que, si es necesario, harán indefinida.