Este 8 de marzo arranca el juicio en Estados Unidos contra el expolicía Derek Chauvin, acusado de la muerte de George Floyd. A lo largo de la jornada, centenares de personas se han manifestado en las calles de Minneapolis, en Minnesota, para recordar al fallecido y en protesta contra la brutalidad policial.
No son las primeras manifestaciones por el asesinato de George Floyd. Tras su fallecimiento, en mayo de 2020, se impulsó el movimiento ‘Black Lives Matter’ en contra del racismo y el abuso policial en Estados Unidos.
‘Black Lives Matter’
Hace escasos días, el pasado 5 de marzo, la ciudad de Nueva York anunció un nuevo proyecto para «deshacer el legado y el daño causado por las prácticas policiales racistas«, una protesta que se desencadenó con masivas concentraciones el pasado mayo en todo el país tras el asesinato del ciudadano negro George Floyd en mayo de 2020 a manos de un policía.
En el vídeo, que inundó las redes sociales, se podía observar cómo el agente posaba su rodilla en el cuello del hombre durante casi 9 minutos, mientras Floyd le repetía en varias ocasiones que no podía respirar.
«Debemos ir más allá para enfrentar el legado dañino de unas prácticas policiales racistas. Estas reformas restablecerán la confianza y la responsabilidad para crear una fuerza policial que sea un reflejo de las comunidades a las que sirve», explicó Bill de Blasio, alcalde de Nueva York, en una rueda de prensa.
Esta iniciativa fue presentada tan solo un día después de que el responsable político de la Policía, Dermot Shea, pidiera perdón por estos comportamientos.
«Tenemos que reconocer esta realidad y yo lo hago. Y debemos reconocer el papel histórico de la policía de Nueva York en el maltrato de las comunidades de color. Lo siento. Nuestro desafío hoy es asegurarnos de que no participaremos ni toleraremos ninguna otra desigualdad o injusticia. Llevamos años de reformas constantes y debemos continuar», dijo el pasado jueves.
La propuesta
La iniciativa contra el racismo policial consta de 36 propuestas y 5 objetivos principales: transparencia y rendición de cuentas, representación y asociación comunal, reconocimiento e investigación de las prácticas racistas policiales, despenalización de la pobreza y creación de un cuerpo policial resiliente, diverso y que ofrezca apoyo a toda la ciudadanía en su conjunto.
A este gesto, De Blasio sumó también el nombramiento de un oficial afroamericano, Rodney Harrison, como nuevo jefe de Policía de Nueva York, el pasado 25 de febrero.
«Tenemos que llevar toda esta ciudad a un mejor lugar en 2021, eso significa que la policía y la comunidad trabajen juntas porque sabemos que esto funciona, lo hemos visto durante seis años seguidos, en los que los crímenes se redujeron. Tenemos que hacerlo otra vez», puntualizó el alcalde tras el nombramiento de Harrison.