Gema María García del Castillo ha sido presentada oficialmente esta noche en el Antiguo Casino de Ciudad Real en un acto con aforo reducido. La ceremonia ha contado con la presencia de la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, la primera teniente de alcalde, Pilar Zamora, junto a varios componentes de la Corporación Municipal, la vicepresidenta de la Diputación de Ciudad Real, María Jesús Villaverde, la Asociación de Dulcineas, la Hermandad de Pandorgos y una nutrida representación de los sectores económico, cultural y social de Ciudad Real.
La alcaldesa de Ciudad Real iniciaba su discurso llena de buenas sensaciones en una presentación que ella conoce muy bien, ya que en 2016 Eva María Masías fue presentada Dulcinea. Por ello, añadía, “puedo conocer la emoción y las sensaciones que hoy embargan a la Dulcinea, y también puedo decir que entiendo la sensación de añoranza que puede estar sintiendo la anterior Dulcinea y sus damas, Fátima, Rosa, Carmen, Marisol y Patricia, quien pocos días dejaran su puesto como representantes de Ciudad Real”. Agradecía su generosidad y las felicitaba por el trabajo realizado. Masías explicaba que ser Dulcinea “es una responsabilidad porque supone ser embajadora de la ciudad durante 365 días, en cualquier ámbito de su actividad social y cultural. Nada es más grato que representar a la ciudad en estos momentos que deben ser de esperanza y de ilusión después de un año tan aciago”.
Eva María Masías terminaba diciendo que “es construyendo la historia de cada día, como se puede mostrar una ciudad que conociéndola se puede amar y respetar”.
Gema María García del Castillo, una mujer y madre, nacida en Ciudad Real, criada en una familia numerosa entre la pedanía de la Poblachuela y el barrio de los Ángeles. Trabaja como celadora y trata de conciliar el voluntariado con su actividad diaria, gracias a su carácter generoso y comprometido.
La nueva Dulcinea empezaba su discurso agradeciendo la asistencia a los que la acompañaban, en esta noche tan especial. Después, de una forma novelada, ha mantenido una conversación retórica con el caballero don Gil de Alarcos, al que le mostraba las mejoras de Ciudad Real y al que le explicaba los grandes logros conseguidos en estos siglos por estas tierras. Gema María García del Castillo añadía que ella recibía este título, para “representar, aprender y transmitir lo que nuestros antecesores nos han trasladado. Esas costumbres y tradiciones que se suelen hacer de forma festiva, pero que en estos tiempos hay que hacerlas con las precauciones necesarias”. Finalizaba diciendo que ella viene a “ser un eslabón más de la cadena para que llegue a otros; vengo a trabajar y a contribuir porque siempre ha sido mi ilusión”.
En el acto, también han tomado la palabra la Dulcinea de hogaño, Fátima de la Flor, visiblemente emocionada, con un precioso discurso de esperanza y fuerza después del año tan difícil que hemos pasado, y la presidente de la Asociación de Dulcineas y Damas Manchegas, Carmen María Palmero.