La nueva ley buscará “impedir, detener y castigar” cualquier conducta que “ponga en grave peligro la seguridad nacional, como el separatismo, la subversión de los poderes del Estado o la organización y ejecución de actividades terroristas, así como actividades de fuerzas extranjeras que interfieran en los asuntos” de Hong Kong
El apoyo de los delegados que componen la Asamblea Nacional Popular, el Parlamento chino, fue casi absoluto: un solo voto en contra y seis abstenciones por 2.878 a favor, pocos minutos antes de que se clausurara oficialmente la sesión anual de la ANP.
La nueva ley ha sido adoptada a pesar de las advertencias lanzadas por la comunidad internacional, desde Estados Unidos a la Unión Europea, que considera que supone una amenaza para los derechos de la antigua colonia británica.