La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha asegurado que, desde que se inmovilizó el ganado ovino y caprino la pasada semana no se ha detectado en la región ningún nuevo foco de viruela.
Además, ha añadido que se han pagado hasta el momento 4 millones de euros en indemnizaciones, por unos 40.000 animales sacrificados.
A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa, ha explicado que desde que se ordenó la inmovilización del ganado ovino y caprino el 9 de febrero se han remitido más de 50 nuevas analíticas a los laboratorios y todas han dado negativo.
La última que dio positivo fue la de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) este mes de febrero.
Los primeros focos de viruela ovina se declararon en septiembre
En septiembre de 2022 se declararon oficialmente focos de viruela en ocho explotaciones de ganado ovino del municipio de Villaescusa de Haro y posteriormente en noviembre de 2022 se declararon dos nuevos focos en La Alberca de Záncara y Tébar.
Además, en enero de 2023 se repitieron dos nuevos focos en estos dos últimos municipios, y el último, el de Alcázar.
La inmovilización de la cabaña ganadera, ha señalado Fernández, es una decisión “muy dura y muy difícil” que puede provocar pérdidas a las explotaciones, pero éstas serían mayores si el contagio se extendiera.
Las restricciones podrían levantarse antes de lo que se pensaba
“Si las cosas van bien” y las analíticas siguen dando negativo, la prohibición de movimiento de ganado ovino y caprino podría levantarse antes de lo que se pensaba, ha asegurado la portavoz de la Junta.
Ha recordado que se está indemnizando con 100 euros por animal sacrificado y 110 si se trata de oveja manchega según se establece en el real decreto que lo regula.
Además, ha avanzado que el Gobierno de Castilla-La Mancha está estudiando la concesión de ayudas para la reposición de la cabaña ganadera para aquellos que así lo deseen.
Núñez lamenta que el consejero de Agricultura no aclare si comparecerá en las Cortes
Por su parte, el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha lamentado que el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, no haya aclarado aún si va a responder a su petición de comparecer en las Cortes regionales para explicar su gestión contra la viruela ovina.
“No tenemos ninguna respuesta por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha”, ha aseverado Núñez en declaraciones a los medios de comunicación durante su visita al Salón Internacional de Maquinaria, Técnicas y Equipos (Enomaq 2023) en Zaragoza, donde participan una treintena de expositores castellano-manchegos.
El líder del PP regional ha criticado el silencio de la Junta de Comunidades ante esta “terrible” crisis de viruela ovina, por lo que espera que el consejero tome “muy pronto” la palabra en sede parlamentaria.
Núñez ha afeado que el Ejecutivo autonómico “no hizo nada” durante los primeros cuatro meses desde que se registró el primer foco de esta enfermedad y que las primeras medidas han llegado tarde, cuando la viruela “ya ha arruinado a cientos de ganaderos” y ha “tirado por tierra miles de explotaciones”, a la vez que perjudica a la industria agroalimentaria.