El Gobierno de Castilla-La Mancha, presidido por Emiliano García-Page, ha aprobado una línea de ayudas por un valor total de 2,7 millones de euros destinada a la renovación de maquinaria y equipos agrícolas y ganaderos en la provincia de Ciudad Real. Esta iniciativa beneficiará a 159 personas que se dedican a la agricultura y la ganadería, con el objetivo de mejorar la eficiencia, reducir el consumo energético y promover prácticas sostenibles en el sector primario.
Compromiso con el Sector Agrícola y Ganadero
Amparo Bremard, delegada provincial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, ha destacado la importancia de esta convocatoria de ayudas, que forma parte de los Planes de Mejora recientemente resueltos. Según Bremard, esta inversión no solo busca modernizar las explotaciones agrícolas y ganaderas, sino también fomentar un uso más eficiente de la energía y una mayor adopción de prácticas respetuosas con el medio ambiente.
Bremard ha subrayado que los 2,7 millones de euros aportados por el Ejecutivo regional se verán multiplicados, dado que se espera que las inversiones realizadas por los beneficiarios superen los 5,2 millones de euros. Esto representa una significativa inyección económica para el sector, que permitirá a los profesionales mejorar la competitividad de sus explotaciones.
Modernización y Competitividad
La delegada provincial ha explicado que las ayudas permitirán a los agricultores y ganaderos adquirir una amplia variedad de maquinaria, desde tractores hasta trituradoras de residuos de cosecha y poda, vibradores de árboles, equipos informáticos y tecnología avanzada como sistemas de autoguiado GPS. Este tipo de equipamiento no solo mejorará la eficiencia y profesionalidad del sector, sino que también contribuirá a incrementar la comodidad y la rapidez en la ejecución de las labores agrícolas y ganaderas.
Impacto en la Economía y el Medio Ambiente
El sector primario es fundamental para la economía de Castilla-La Mancha, y esta línea de ayudas refuerza el compromiso del Gobierno regional con la sostenibilidad y la modernización de las explotaciones. Según Bremard, «estas inversiones son un incentivo clave para que el sector avance en términos de eficiencia, competitividad y profesionalidad». Además, ha resaltado la importancia de que estas mejoras contribuyan a una mayor calidad de vida para los agricultores y ganaderos, así como a la preservación del medio ambiente.
En definitiva, esta iniciativa se enmarca dentro de la estrategia del Gobierno de Castilla-La Mancha para fortalecer el sector agrícola y ganadero, asegurando que las explotaciones de la región sean más eficientes, sostenibles y competitivas, garantizando así su viabilidad a largo plazo.