Emiliano García-Page anuncia que las cinco provincias de Castilla-La Mancha contarán con oncología radioterápica antes de que finalice 2025, adelantando los plazos previstos.
Un avance histórico en la lucha contra el cáncer
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado que, antes de que finalice 2025, las cinco provincias de la región contarán con servicios de oncología radioterápica para el tratamiento del cáncer. Esta infraestructura sanitaria, que hasta hace pocos años solo estaba disponible en Albacete y Ciudad Real, se extenderá a toda la comunidad autónoma, cumpliendo así un compromiso adquirido por el Ejecutivo regional.
En un mensaje difundido con motivo del Día Mundial contra el Cáncer, García-Page ha destacado la importancia de este avance, que supone un salto cualitativo en la atención sanitaria de Castilla-La Mancha. «Es un esfuerzo que demuestra que los impuestos tienen un sentido y una utilidad. La salud está por delante de todo, y especialmente en la lucha contra enfermedades tan complejas y devastadoras como el cáncer», ha afirmado el presidente regional.
Cumplimiento anticipado de un compromiso clave
El jefe del Ejecutivo autonómico ha recordado que, cuando asumió la Presidencia en 2015, el servicio de oncología radioterápica solo estaba disponible en dos provincias. Desde entonces, la Junta ha trabajado para extenderlo progresivamente, con la meta de que en 2025 todas las provincias de la región cuenten con este servicio, lo que supone una importante mejora en la equidad del acceso a los tratamientos oncológicos.
“Llegamos a comprometernos, lo dije en el último discurso de investidura, a que tendríamos oncología radioterápica en todas las provincias, y lo vamos a cumplir antes incluso de lo previsto”, ha enfatizado García-Page.
Este anuncio posiciona a Castilla-La Mancha como una de las comunidades autónomas que más han avanzado en la descentralización de los tratamientos oncológicos, garantizando que ningún paciente tenga que desplazarse grandes distancias para recibir atención especializada.
Diagnóstico temprano y personalización del tratamiento
Además de la expansión de la oncología radioterápica, el presidente regional ha recordado que en Castilla-La Mancha se han realizado cerca de 1.000 test genéticos predictivos de cáncer de mama desde que en 2017 el Gobierno autonómico incorporó esta prestación al sistema de salud pública.
Este programa de perfil genómico personalizado permite clasificar mejor el riesgo de las pacientes, optimizando los tratamientos y, en muchos casos, evitando el uso de la quimioterapia.
Importancia de los test genéticos
Los avances en biología molecular y genética han permitido desarrollar pruebas que pueden:
- Predecir el riesgo de recurrencia de un tumor.
- Determinar la necesidad de tratamientos adicionales, como la quimioterapia, para mejorar las tasas de supervivencia.
- Optimizar los tratamientos, ofreciendo una medicina más personalizada y menos invasiva.
El impacto de estas técnicas ha sido significativo en la mejora del pronóstico y calidad de vida de muchas mujeres diagnosticadas con cáncer de mama.
Un modelo sanitario en evolución
La implantación de la oncología radioterápica en todas las provincias y la apuesta por el diagnóstico genético reflejan un esfuerzo del Gobierno regional por fortalecer el sistema sanitario y dotarlo de herramientas innovadoras para el tratamiento del cáncer.
Con estas medidas, Castilla-La Mancha avanza hacia un modelo de atención oncológica más accesible y eficiente, en el que la tecnología y la equidad territorial juegan un papel fundamental.
Compromiso con la salud pública
El anuncio de García-Page se enmarca dentro de un conjunto de inversiones estratégicas en sanidad, que incluyen:
- La modernización de hospitales y centros de salud.
- La incorporación de nuevas tecnologías médicas.
- La ampliación de los programas de prevención y diagnóstico precoz.
Con estos avances, Castilla-La Mancha refuerza su compromiso con la salud pública y la lucha contra el cáncer, garantizando que todos los ciudadanos tengan acceso a tratamientos de alta calidad sin importar su lugar de residencia.
La previsión es que a finales de 2025 este servicio esté plenamente operativo en las cinco provincias, marcando un hito en la sanidad regional y mejorando significativamente la atención a los pacientes oncológicos.