El Gobierno de Castilla-La Mancha ha alcanzado un hito significativo en su Estrategia Regional frente a la Despoblación, al implementar más del 52 por ciento de las actuaciones previstas en esta hoja de ruta clave para combatir el reto demográfico en la región. La estrategia, enmarcada en la aplicación de la Ley de medidas económicas, sociales y tributarias frente a la Despoblación, ha logrado activar el 96 por ciento de las 210 medidas planificadas, a solo tres años de su inicio.
Ejecución acelerada y ambiciosa
El vicepresidente primero del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, ha detallado estos avances durante la reunión de evaluación intermedia celebrada este jueves en Toledo, destacando que el 40 % de las acciones están en fase de desarrollo avanzado, es decir, con más del 70 % de ejecución completada.
Guijarro ha subrayado también el fuerte compromiso presupuestario del Ejecutivo autonómico, que ha destinado más de 5.100 millones de euros desde 2021 a esta estrategia. Una cifra que representa un 140 % más de lo inicialmente previsto, consolidando a Castilla-La Mancha como una referencia nacional en políticas contra la despoblación.
Evaluación participativa y basada en datos
Esta evaluación intermedia forma parte de lo estipulado por la propia estrategia, que tendrá vigencia hasta 2031. Para ello, se han retomado los mecanismos de participación utilizados durante su redacción, reuniendo a una treintena de colectivos sociales, entidades locales y organizaciones de la sociedad civil en esta primera mesa de trabajo.
El objetivo es analizar de forma conjunta el impacto de las medidas, sus resultados reales y plantear posibles ajustes o refuerzos en función de la experiencia acumulada y las nuevas necesidades de los territorios.
Primeros resultados: se revierte la pérdida de población
Uno de los datos más esperanzadores que ha puesto sobre la mesa el vicepresidente primero es el saldo migratorio positivo registrado en zonas afectadas por la despoblación, cifrado en 15.000 nuevos habitantes. De cada 100 personas que se trasladan a vivir a Castilla-La Mancha, 23 eligen asentarse en municipios considerados en riesgo demográfico.
Este repunte en la llegada de nuevos vecinos a estas localidades es uno de los primeros indicadores tangibles de que las políticas públicas están empezando a revertir una tendencia negativa histórica.
Medidas clave y marco legislativo pionero
Martínez Guijarro ha recordado que Castilla-La Mancha es la única comunidad autónoma que incorpora una Memoria de Impacto Demográfico en cada Ley de Presupuestos desde 2023. Esta herramienta permite analizar cómo cada política pública incide en la cohesión territorial y en el equilibrio poblacional, garantizando que la perspectiva demográfica se integre de forma transversal en toda la acción del Gobierno regional.
Compromiso con la igualdad territorial
El vicepresidente ha insistido en que esta estrategia “no es solo una respuesta al despoblamiento rural, sino una apuesta por la igualdad de oportunidades entre ciudadanos, vivan donde vivan”. En este sentido, ha destacado el papel que desempeñan las inversiones en conectividad, servicios públicos, apoyo al emprendimiento, transporte o vivienda como palancas para fijar población en el medio rural.
La Estrategia Regional frente a la Despoblación sigue consolidándose así como un referente en el ámbito autonómico y estatal, tanto por su diseño participativo como por su implementación eficaz y bien financiada, con resultados ya visibles en el mapa demográfico castellanomanchego.