La aventura de Carlos Sainz en la Fórmula 1 ha sido muy intensa. A sus 26 años ha estado ya en cuatro escudería diferentes y este verano ha alcanzado el sueño de todo piloto: vestir los colores de Ferrari. Por ello ahora se plantea una «estabilidad a largo plazo».
El español explica estas palabras: «La estabilidad también es mi objetivo con Ferrari y por eso firmé un contrato de dos años con ellos. Mientras estemos contentos el uno con el otro, quiero que esa sea la nueva tendencia en mis contratos, no sólo un año como lo estuve con Renault sin saber lo que iba a pasar».
Y explica el motivo, relacionado con su paso por el equipo McLaren: «Si hay algo que he aprendido en McLaren, es lo importante que es estar más de un año en un equipo para extraer el máximo potencial de ese coche y de la gente que está a tu lado».
Toro Rosso, Renault, McLaren y ahora Ferrari. Esos han sido los equipos de Sainz en F1. Curiosamente una trayectoria muy parecida a la de Fernando Alonso, el otro piloto español de la parrilla y gran ídolo de Sainz desde que era un niño y acudió por primera vez a una carrera del ‘Gran Circo.
«Honestamente, creo que la única vez en la F1 donde mi carrera ha ido subiendo y bajando de un equipo a otro fue cuando dejé Toro Rosso para ir a Renault y luego a McLaren. Pero recordemos que en Toro Rosso estuve tres años. En 2017 me sentí como en casa en Toro Rosso y rendí a un buen nivel. Pero luego llegó la oportunidad de Renault y Red Bull todavía me contrató, así que fue una situación muy extraña allí y finalmente me dejaron irme a McLaren y pensé que iba a construir una relación a largo plazo con McLaren. Disfruté mucho los dos años con el equipo. El segundo año vimos mejoras en comparación con el primero. Eso demuestra que la estabilidad en un equipo y permanecer en un equipo durante mucho tiempo ayuda con el rendimiento y te convierte en un piloto más rápido y mejor», finaliza.