La compra de segundas residencias en España ha descendido un 9% y uno de los motivos podría ser el miedo a la okupación, ya que estas casas permanecen vacías durante gran parte del año.
Además, la okupación se ha multiplicado durante los últimos meses, y resolver el problema se antoja complicado en la mayoría de los casos, ya que hay que respetar unos plazos y los propietarios se sienten impotentes.
«Fenómenos como la okupación no solo alejan la inversión de ese particular que quiere comprar una vivienda, sino también de los grandes operadores que ven que en nuestro país no hay una legislación», asegura Beatriz Toribio, Directora General de Asval.
Varios propietarios de residencias vacacionales nos cuentan que entre los propios vecinos se vigilan las casas para evitar verse afectados por el fenómeno de la okupación, en auge siempre durante la época de verano.
Además, la crisis económica generada por la pandemia del coronavirus no ayuda. Los jóvenes se decantan por el alquiler, o directamente no disponen de medios para comprar una vivienda.