habituales en otras zonas de cultivo de Canarias, podrían ser la solución para mantener la actividad en esas plantaciones. Recuperar el riego es una de las prioridades para que los agricultores no pierdan sus plantaciones por la falta de agua.
La lava del volcán de La Palma ha destrozado las infraestructuras con las que se ha cruzado. Garantizar el suministro de agua es ahora mismo una de las principales preocupaciones. Los problemas de abastecimiento de agua y de riego se están notando en los municipios de El paso y El Llano y en las zonas más al sur de la colada de lava, como Puerto de Naos o El Remo.
Por el momento, no se registran incidencias de corte de suministro eléctrico ni de las telecomunicaciones. Cerca de 6.000 personas han sido evacuadas desde que comenzó la erupción del volcán de La Palma. Solo quedaba un suministro de agua bajo la lava que aún seguía funcionando, la tubería milagro. Sin embargo, finalmente ha colapsado y lo peor es que afecta a la zona más fértil de la isla de La Palma.
Alternativas para el riego por el volcán de La Palma
Hay 600 hectáreas de plátanos en peligro. «Estas plantas beben mucha agua cada día y no pueden estar más de entre 3 semanas y un mes sin agua, porque ya no solo perdemos la cosecha, que ya sabemos que la hemos perdido, sino que perdemos la planta», comentaba uno de los agricultores que se ha visto afectado por el volcán de La Palma.
Urge una solución. Perforar en la lava para reparar la tubería es muy complicado. Unir las tuberías salvadas en un anillo hídrico es lento. Lo más rápido es traer desaladoras portátiles. «Van a llegar próximamente a nuestra isla. Estamos trabajando con las conducciones correspondientes para poder llevar esa agua a esos lugares que la necesitan».
Se espera la llegada de barcos con agua en unos quince días, pero los agricultores creen que desde que estalló la erupción del volcán de La Palma deberían haberse activado medidas urgentes. «Se van dilatando en el tiempo… Si pasamos del mes, la producción del próximo año también la matará», comenta otro agricultor. La única otra esperanza es que el agua caiga del cielo.