Ocho días después de las primeras llamas, el incendio forestal que asola la isla griega de Rodas sigue fuera de control, mientras cientos de bomberos también luchan por controlar el fuego en la islas de Corfú y Eubea.
En condiciones climatológicas que se prevén adversas, con altas temperaturas y fuertes vientos, unos 270 efectivos participan en los arduos intentos de contener las llamas en Rodas, que ya han calcinado más de 14.000 hectáreas de bosque, además de matar a un elevado número de animales.
Además, unas 19.000 personas, entre ellas 7.000 turistas, tuvieron que ser trasladadas a lugares seguros de Rodas, en lo que ha sido la mayor operación de evacuación registrada hasta ahora en la historia de Grecia, según la información proporcionada por los bomberos del país.
Hoy, las llamas siguen ardiendo en una vasta zona que incluye el centro y el sur de la isla, cerca de la costa oriental.
Cientos de efectivos y voluntarios han trabajado durante toda la noche para evitar que el fuego alcanzara la localidad de Malonas y el pueblo costero de Kalathos.
Fuera de control los incendios en Corfú y Eubea
Mientras, los medios informan de que se ha reavivado otro gran incendio forestal en la isla de Corfú, en el noroeste del país, que mantiene ocupados a los bomberos por tercer día consecutivo.
Este fuego llevó a las autoridades a evacuar en la madrugada del lunes, como medida de precaución, a unos 2.500 turistas de pueblos costeros en el noreste de la isla.
Sin embargo, éstos pudieron regresar posteriormente a sus lugares de alojamiento después de que se lograra contener las llamas, que hasta el momento arden en el monte, sin amenazar las instalaciones turísticas de la costa.
También en la isla de Eubea, al noreste de Atenas, más de un centenar de bomberos seguían hoy luchando contra otro incendio que sigue por tercer día consecutivo fuera de control en torno al poblado costero de Caristo.
Según las autoridades locales, una persona -un ganadero- se encuentra desaparecido desde el pasado domingo en esta zona, donde las llamas obligaron a evacuar nueve localidades y alcanzaron el pueblo de Platanistós y Potami, calcinando varias viviendas.
Temperaturas extremas y fuertes vientos
Decenas de otros focos de menor alcance repartidos por todo el territorio heleno mantienen ocupados a los bomberos en todo el país y elevada la alerta de incendios, propiciados por temperaturas inusitadamente altas, sequía y fuertes ráfagas de viento.
Para combatir los fuegos, Grecia ha recibido ayuda de Francia, Italia, Croacia, Rumanía, Polonia, Egipto, Israel, Turquía y Eslovaquia.
En medio de una ola de varios días de calor extremo, los termómetros marcaron 46,4 grados el domingo en la ciudad de Gitión, en el Peloponeso, la temperatura más alta jamás registrada en el país heleno.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, la canícula se mantendrá hasta el jueves, cuando se espera una bajada significativa de las temperaturas (de entre 5 y 7 grados).