Ecologistas en Acción justifica las alegaciones presentadas porque considera que el texto presentado por el Gobierno regional «queda lejos de atender el derecho universal al agua potable y las exigencias medioambientales»
Ecologistas en Acción (EA) ha presentado, ante la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, alegaciones al anteproyecto de ley de Aguas de Castilla-La Mancha, que incluyen cambios importantes al texto y «vienen a cubrir múltiples carencias, según el grupo conservacionista.
Así lo ha dado a conocer en una nota de prensa esta organización ecologista, que ha justificado las alegaciones presentadas porque considera que el texto presentado por el Gobierno regional «queda lejos de atender el derecho universal al agua potable y las exigencias medioambientales».
Según los ecologistas, en un contexto generalizado de cambio climático y emergencia ecológica, la ley de Aguas «puede y debe abordarse con ambición».
Entre las principales cuestiones que se plantean en las alegaciones figura que el texto debería de mencionar y asumir dos principios fundamentales como son el derecho al agua potable, y el respeto y la contribución de la comunidad autónoma a preservar los caudales medioambientales.
Sin embargo, un borrador que consta de 104 páginas solo dedica un artículo (el 106) y apenas diez líneas, a citar de pasada la necesidad de proteger la calidad de las aguas de abastecimiento «y no dice nada del derecho humano al agua que se ampara en llamamientos de las Naciones Unidas a reconocerlo», han advertido los conservacioinistas.
También echan en falta que el texto normativo figuren «los graves problemas de sobreexplotación cuantitativa de aguas subterráneas y superficiales que hay en Castilla-La Mancha», cuando consideran que «es la principal amenaza para el agua en la región junto con los trasvases».
Asimismo, los ecologistas critican que la ley resulta «muy economicista», ya que hace descansar en las tasas y sobre todo en un nuevo e injusto canon ambiental la consecución de fondos para sufragar infraestructuras hidráulicas entre las que sin duda se contemplan algunas de muy elevado impacto, como nuevos embalses y captaciones, así como conexiones entre ríos, tal vez incluso trasvases.
Ecologistas en Acción considera que de ese canon ambiental hay que excluir el agua de boca, al menos en un volumen mínimo que asegure el acceso al agua sin costos para todas las personas y familias, especialmente las más desfavorecidas.
Y también entienden que debe dedicarse sólo al mantenimiento y disposición de las infraestructuras de depuración y abastecimiento imprescindibles y a mejorar la cantidad y la calidad de las aguas en los cauces fluviales.
Para los ecologistas es «paradójico y vergonzoso» que de ese canon se excluya a quienes más agua consumen en la región, más del 80 por ciento del volumen, «y que no son otros que los sectores de la agricultura de regadío y de la ganadería intensiva», han añadido.
Ecologistas en Acción ha destacado que la ley de Aguas «debe ser equitativa socialmente y ambiciosa ambientalmente» y por este motivo ha considerado que «debe reformularse el texto».