Malas noticias para Pedro Sánchez en la encuesta de DYM que publican este miércoles los medios del Grupo Henneo: el PSOE es el gran perjudicado de la irrupción de Sumar en el panorama electoral, mientras que la derecha mejora ligeramente su proyección de escaños, pese a perder algunas décimas en intención de voto.
Como en todos los sondeos que merecen tal nombre, el partido más votado sería el PP, que tendría el 30,6% de las papeletas, una décima menos que en marzo, y una horquilla bastante amplia entre 127 y 132 escaños.
Le seguiría el PSOE, pero después de un sonoro batacazo: los de Pedro Sánchez se quedan en el 24,7%, lo que supone perder tres puntos y medio frente a la encuesta de marzo, todo un mundo en sólo cuatro semanas y, además, rompe una línea ascendente que los socialistas venían teniendo desde el pasado mes de julio y, para rematar, les lleva a su punto más bajo en las encuestas de DYM desde julio de 2021.
El desplome del PSOE es todavía más llamativo si atendemos al recuento de escaños: si su horquilla en el mes de marzo estaba entre 108 y 113 diputados ahora se quedaría en un máximo de 103 y podría caer por debajo del centenar, hasta 98.
Una caída socialista que alimenta sobre todo a Sumar, que irrumpe con un 9,2% del voto y le daría a los de Yolanda Díaz entre 18 y 22 escaños; mientras, Unidas Podemos muestra lo que sin duda es una fortaleza inesperada, aunque pueda parecer lo contrario: retendrían el 6,8% del voto y de 7 a 10 diputados.
En el otro lado del hemiciclo Vox no tiene un buen resultado: se deja siete décimas respecto a marzo para quedarse en un 14,6% y tendría entre 45 y 49 escaños, mientras que un mes antes su horquilla estaba entre los 47 y los 50. Finalmente, el sondeo le concede un 2,2% de intención de voto a Ciudadanos, que podría tener un diputado.
Así las cosas, si tenemos en cuenta la media de sus horquillas el PP y Vox lograrían una mayoría absoluta de 177 diputados, mientras un mes antes se quedaban en 175. La suma de la izquierda mejoraría: tomando también el punto medio de sus proyecciones de escaños pasarían de 123 a 133, pero aun así se quedarían lejos de poder impedir la investidura de Feijóo.