Uno de los sectores afectados por el coronavirus es el de la moda. Ya no se celebran desfiles, y aquí también ha habido que reinventarse por el coronavirus. Las pasarelas ahora dan el salto a lo virtual.
La nueva moda que llega
Últimos retoques entre bambalinas, la tensión de los minutos previos, la curiosidad de los que esperan al otro lado y por fin, el momento en el que llevan meses trabajando. Así eran los desfiles antes del coronavirus, pero ahora eso también ha cambiado.
De las pasarelas en las que había centenares de personas el coronavirus ha obligado a realizar eventos que solo se pueden seguir a través de una pantalla.
Esa es una opción, la virtual, a la que cada vez se suman más marcas incluso algunas optan por buscar espacios al aire libre para lucir sus diseños y enseñarlos después en redes sociales. «Es una forma de llegar a mucha más gente sin que haya riesgo» dice esta diseñadora.
Buscan reinventarse para intentar minimizar el impacto económico en el sector de la moda. Las modelos no tienen ahora tanto trabajo. Maria Shapakova es modelo, «el año pasado tenía contratos como tres meses y luego más».
Sergio Alís, director de modelos, «si antes necesitaban cuatro modelos, ahora necesitan dos». Y eso engloba a muchos profesionales… maquilladores, estilistas, diseñadores entre muchos otros que esperan con ganas que vuelvan a iluminarse las pasarelas.