La Comisión de Protección de Datos de Irlanda (DPC) multó este miércoles con 390 millones de euros (413 millones de dólares) a Meta, la propietaria de Facebook e Instagram, por haber quebrado en Irlanda las normativas de protección de datos en esas plataformas.
En un comunicado difundido este miércoles, las autoridades irlandesas detallaron una sanción de 210 millones de euros (222 millones de dólares) relacionada con infracciones de protección de datos en los servicios de Facebook y con otros 180 millones de euros (191 millones de dólares) por infracciones en Instagram.
La DPC de Irlanda, el principal regulador de muchas de las mayores compañías del mundo dentro de la Unión Europea (UE), ha instruido asimismo a Meta Ireland a cumplir con la normativa sobre operaciones de procesamiento de datos y a revaluar las bases legales sobre las que gestiona la publicidad en función de los datos personales de los usuarios «en un periodo de tres meses».
Las investigaciones de la DPC se iniciaron al presentarse dos quejas sobre esos servicios de Facebook e Instagram, realizada en el primer caso por la ONG austríaca Europa versus Facebook y en el segundo con relación a un asunto acaecido en Bélgica con Instagram, ambas presentadas el 25 de mayo de 2018, cuando entró en vigor la normativa de protección de datos.
Meta tendrá que permitir en ese plazo de tres meses a los usuarios que dispongan de una versión de todas las aplicaciones que no utilice datos personales con fines de publicidad.
Esa decisión seguirá permitiendo a Meta emplear información personal para personalizar anuncios o pedir a sus usuarios su consentimiento expreso y estos deben poder retirar ese consentimiento en cualquier momento.
El activista austríaco Max Schrems, fundador de la ONG Europa versus Facebook, reaccionó hoy a la sanción del regulador irlandés indicando que supone «un contratiempo gigante para los beneficios de Meta en la UE».
«Las personas ahora tienen que ser preguntadas si quieren que sus datos personales se utilicen para fines de publicidad o no. Deben tener una opción de ‘sí o no’ y pueden cambiar de parecer en cualquier momento», indicó.