La pandemia de COVID-19 cambiará los protocolos de los viajes en avión. A pesar de que las aerolíneas están implementando testeos y nuevos procedimientos de limpieza es necesario cambiar la forma en la que los pasajeros se sientan en vuelos llenos.
Una compañía italiana desarrolló asientos fáciles de instalar para que las personas mantengan la distancia entre sí en los vuelos en “Economy”.
La empresa Aviointeriors, conocida por realizar asientos de primera calidad, diseñó un prototipo que separa a los viajeros lo más posible para evitar un posible contagio.
Antes, “cuanta más gente en un avión, mejor”, hoy este paradigma debe cambiar: las aerolíneas deben centrarse en cómo lograr un distanciamiento social efectivo. La parte “Economy” del vuelo es la más vulnerable: hay más cantidad de asientos.
La tecnología desarrollada por Aviointeriors crea un “bloqueo” entre asientos.
Diseñaron el asiento “Glassafe” o “vidrio seguro”: un asiento separado por un vidrio en la cabecera de cada asiento. Esta tecnología mantiene la configuración actual de los asientos sin separaciones físicas pero con un divisor a la altura de la cabeza.
El divisor actúa como una barrera para los gérmenes personales: esta tecnología permitiría a las aerolíneas vender todos los asientos y llenar sus vuelos para no perder económicamente en un mundo pos-pandemia.
Es una alternativa que las aerolíneas consideran actualmente. Delta Airlines introducirá nuevas cabinas de primera clase en sus aviones para llevar seguridad a los viajeros.
Cuál es el próximo paso de Aviointeriors frente a la pandemia de coronavirus
Para lograr el distanciamiento social en el aire, además diseñaron “Janus Seat”: esta vez, sí cambiaría la configuración de asientos de los aviones.
Los asientos en el medio estarán orientados hacia atrás en esta configuración. También contarán con barreras que lo rodean para asegurar la distancia social.
Aunque no es ideal cuando se viaja con un acompañante, la tecnología de los asientos ofrece un distanciamiento mejorado en comparación con el asiento Glassafe, así como un mínimo adicional de privacidad.
Estas invenciones tecnológicas resultan claves para que las aerolíneas puedan reconstruir su confianza con los viajeros.