Las academias de recuperación no están pasando por su mejor momento. Se trata de otro de los negocios más azotados por la crisis del coronavirus. Desde el 14 de marzo permanecen cerradas muchas de ellas, y ahora en verano están teniendo menos alumnos de los habituales.
Lo normal es que hubiera más de cien alumnos por cada centro, pero ahora sólo tienen una decena de estudiantes a los que atienden de forma online.
Alumnos que normalmente acudían a estas academias no lo han hecho este año. En Madrid sí que ha abierto alguna academia, a la que los alumnos acuden con mascarillas, mamparas y manteniendo la distancia de seguridad. Aún así, hay un 20% menos de alumnos.