Uno de los animales marinos con peor fama es la medusa, ya que el miedo a sus picaduras hace que a veces nos metamos con miedo en las playas. Al contrario de lo que se suele pensar, las medusas no atacan por sí solas, sino que pican como mecanismo de defensa cuando entran en contacto con un cuerpo extraño o por cambios bruscos de temperatura o salinidad.
Nadie quiere que una picadura de medusa le amargue unas vacaciones o un estupendo baño en el mar. En este mapa puedes consultar cuáles son las playas de España con más medusas y te damos algunos consejos para evitar estas picaduras y, asimismo, te ofrecemos tratamientos y remedios naturales si ya te ha picado esta especie marina.
Picadura de medusa: Tratamientos y remedios naturales
Si tienes picazón en una zona de tu cuerpo, ardor o marcas rojas, lo más seguro es que te haya picado una medusa en la playa. Lo importante es mantener la calma cuando esto ocurre, ya que la picadura es molesta y algo dolorosa, pero no suele ser grave. Estas son las recomendaciones a seguir, paso a paso.
Lo ideal es lavar la zona con suero fisiológico, pero como esto es difícil de tener en la playa, puedes enjuagarte la picadura con el agua del mar. Eso sí, evita rascarte lo máximo posible para no empeorar la situación.
Aplicar frío también ayuda. Puedes hacerlo mediante una bolsa de plástico o toalla con cubitos de hielo durante unos 15 minutos (en lapsos de 2 a 3 minutos de descanso).
También puedes echarte bicarbonato, lavar la herida con tintura de yodo o emplear una crema antihistamínica para evitar infecciones.
No obstante, lo más recomendable es acudir inmediatamente a un puesto de la cruz roja en la playa. Ellos sabrán qué hacer y tendrán el material necesario para tratar las picaduras de medusa.
Consejos para prevenir las picaduras de medusa
En primer lugar, presta atención a las banderas de la playa. Muchas veces pensamos que una bandera roja significa que hay fuerte oleaje y es peligroso el baño, pero también puede significar la presencia de medusas en el mar. De hecho, si las autoridades de la zona detectan una alta presencia de medusas, además de la bandera roja, también pueden poner una bandera específica que alerta del riesgo de presencia de medusas.
En segundo lugar, es importante conocer los factores que atraen a las medusas a la orilla. Una de estas causas son las corrientes y los vientos fuertes que hacen más probable que estos animales lleguen a las zonas de baño. De hecho, aunque estén alejadas de la orilla, el oleaje puede romper sus tentáculos (que pueden picar) y acercarlos a los bañistas.
Y, por último, no te muevas bruscamente en el agua. La primera reacción al ver a una medusa junto a nosotros es asustarnos y salir rápido. Pero, aunque sea difícil, lo mejor es hacerlo con calma, sin movimientos bruscos que puedan atraer sus tentáculos. Asimismo, aunque una medusa parezca muerta, no la toques, ya que puede picar igualmente. En este caso, lo mejor es avisar a alguna autoridad de la zona para que retire de forma segura el animal.