El gobierno de Taiwán comienza prepararse ante un posible ataque de China tras intensificarse las tensiones entre los territorios asiáticos. Las relaciones entre Pekín y Taipéi penden de un hilo después de la llegada de Nancy Pelosi a la isla y las maniobras militares sin precedentes del gigante asiático. En el nuevo capítulo de esta guerra fría en Asia llega con maniobras militares de defensa con fuego real por parte de Taiwán.
Fuerzas taiwanesas usaron fuego real en maniobras defensivas ante una posible invasión china. Se trata de pruebas anuales de artillería pesada anunciadas por lo que para el gigante asiático es su provincia. Dichas maniobras se llevan a cabo en el campo de entrenamiento de Fenggang, al sur, según detalla la agencia de noticias CNA.
Asimismo, el portavoz del Octavo Cuerpo del Ejército de Taiwán, Lou Woei-jye, ha confirmado que los ejercicios comenzaron en el condado meridional de Pingtung con el disparo de bengalas y artillerías. Este simulacro también tendrá lugar el próximo jueves, que incluye el despliegue de cientos de tropas y unos 40 obuses, según las fuerzas taiwanesas.
Un polvorín que podría estallar en cualquier momento
Taiwán vive bajo amenaza de invasión de China. El país gobernado por Xi Jinping considera que es una provincia del país, mientras que el gobierno regional de Tsai Ing-wen reconoce a Taiwán como un Estado independiente.
La isla no recibía a ningún político estadounidense desde el año 1997, cuando el republicano Newt Gingrich visitó el territorio. El régimen de Xi Jinping sigue insistiendo en la soberanía china sobre Taiwán y mantiene la política de una ‘China única’. Aunque la Casa Blanca sostiene que no defiende la independencia de Taiwán, la visita de Pelosi constituye para China una muestra de respaldo a la secesión de la isla.