La actividad industrial de China creció en julio al mayor ritmo desde hace casi una década, según el índice gerente de compras (PMI) del sector manufacturero publicado hoy por el diario económico privado Caixin y que muchos inversores toman como referencia para el país asiático.
El PMI de julio se situó en máximos desde enero de 2011, con 52,8 puntos frente a los 51,2 que marcó en junio.
En este índice, que elabora la compañía de información económica británica IHS Markit, un registro por encima del umbral de los 50 puntos supone crecimiento y por debajo, contracción.
El pasado viernes la Oficina Nacional de Estadística (ONE) informó de que el PMI oficial de la industria manufacturera se situó en julio en 51,1 puntos, en su quinto mes consecutivo de crecimiento.
Así, tanto la cifra de la ONE como la de IHS Markit superaron las previsiones y muestran una recuperación del sector.
«En general, los rebrotes de la epidemia en algunas regiones no han dañado la tendencia a la mejoría del sector manufacturero, que siguió recuperándose según se levantaban más medidas de control de la epidemia», aseguró Wang Zhe, economista de Caixin.
«La oferta y la demanda han mejorado, con los indicadores manteniendo el impulso. Sin embargo -aseveró Wang-, necesitamos seguir prestando atención a la debilidad tanto del empleo como de la demanda externa».
Según la consultora británica Capital Economics, el PMI oficial del pasado viernes «ya apuntaba a una fuerte recuperación al inicio del tercer trimestre. Pero el índice de Caixin publicado hoy es todavía más optimista y señala que el ritmo de expansión de la industria el mes pasado fue el más fuerte en casi una década».
Antes de que acabe el año
«Los datos de la encuesta coinciden con nuestra opinión de que las políticas de estímulo han allanado el terreno para un período de crecimiento por encima de la tendencia en la industria y la construcción», afirma el economista Julian Evans-Pritchard, de Capital Economics, en un informe enviado a sus abonados.
El analista añade que, «a corto plazo, esto debería ayudar a compensar la debilidad continuada del consumo y los servicios, permitiendo que el conjunto de la economía regrese a su tendencia ‘prevírica’ antes de que acabe el año».
Por su parte, el estadístico de la ONE Zhao Qinghe afirmó el pasado viernes que «los planes de prevención y desarrollo han surtido efecto y las operaciones han seguido mejorando».
Después de imponer estrictas medidas para controlar la propagación del virus en su territorio durante los primeros meses del año, China volvió al crecimiento económico en el segundo trimestre de 2020, con un aumento del producto interior bruto (PIB) del 3,2% interanual, según las cifras oficiales.
En el conjunto de los primeros seis meses del año la economía del gigante asiático se contrajo un 1,6%