Convocada por las Cooperativas Agroalimentarias, las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA, los regantes (Fenacore), la Real Federación Española de Caza, la Oficina Nacional de la Caza, Alianza Rural y la Unión de Criadores del Toro de Lidia , la manifestación -en la que han participado 200.000 personas, según los convocantes y que coincide con el séptimo día de la huelga del transporte- tiene como objetivo principal «alzar la voz y reivindicar el futuro para los pueblos».
Así, bajo el lema ‘El mundo rural despierta’, los manifestantes han asegurado que «no se puedan vender sus productos bajo el precio del coste». «Hay que intervenir el precio de la energía. La electricidad y el gas han cuadruplicado sus precios, no podemos seguir así, trabajando a pérdidas», ha denunciado Miguel Padilla, secretario general de COAG, en declaraciones recogidas por ‘Europa Press’.
«Tendremos que malvender nuestra tierras a fondos de inversión»
Padilla ha dicho que los agricultores y ganaderos se comprometen a «seguir produciendo alimentos para los 47 millones de españoles, como hicimos durante lo peor de la pandemia», siempre y cuando el Gobierno de Pedro Sánchez se comprometa a tomar medidas para ayudarlos.
«Hay que terminar con la especulación o tendremos que malvender nuestras tierras a fondos de inversión y la España rural estará más muerta todavía. Mientras unos pocos se hacen millonarios, el campo se muere de hambre», ha denunciado.
La movilización, que ha transcurrido en un ambiente festivo, con 45 tractores, un gran número de animales, entre ellos caballos o gallos, y tamborradas, se ha iniciado en en la Plaza Emperador Carlos V y ha recorrido el Paseo de la Castellana para llegar a la Plaza de San Juan de la Cruz, sede del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y terminar frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.