La flexibilización para aplazar y fraccionar deudas tributarias beneficiará a unos 4.500 contribuyentes y supondrá inyectar en la economía regional 10,5 millones.
La Consejería de Hacienda publicará este viernes en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) varias medidas excepcionales para flexibilizar las condiciones y el fraccionamiento del pago de deudas de carácter tributario, con el objetivo de reducir los problemas de liquidez de los ciudadanos y profesionales.
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha informado en una rueda de prensa de estas medidas que entrarán en vigor una vez se publiquen el viernes y con las que el Gobierno regional quiere paliar los efectos que la pandemia de coronavirus está teniendo sobre la economía.
Según establece la Orden de Hacienda, se incrementa de 6.000 a 30.000 euros el importe a partir del cual no se exigirá garantía alguna cuando se solicite aplazar o fraccionar una deuda con la administración.
Se facilita asimismo la posibilidad de conceder el fraccionamiento de manera automática cuando el importe de la deuda tributaria sea inferior a 10.000 euros, frente a los 3.000 actuales.
Y se concede con carácter automático un periodo de carencia de seis meses en el pago de las cuotas aplazadas tanto para las nuevas solicitudes de fraccionamiento como para las que ya estén en vigor.
Estas medidas tendrán una vigencia hasta el 31 de diciembre, prorrogables por otro año más, ha dicho el consejero, quien ha añadido que beneficiarán a 4.500 contribuyentes castellano-manchegos y tendrán un impacto en las finanzas públicas de 10,5 millones de euros.
Las medidas aprobadas tratan de mitigar los problemas de liquidez, especialmente para aquellos que realizan actividades empresariales y profesionales y les ayudan a superar las dificultades de tesorería que la crisis económica les esté pudiendo ocasionar, ha destacado el consejero, quien ha precisado que se han diseñado teniendo en cuenta el perfil medio de los contribuyentes castellano-manchegos y con el fin de aliviar la complicada situación que la crisis del coronavirus está suponiendo.
Estas medidas podrán beneficiar al 95 % de los contribuyentes que suelen solicitar aplazamientos y fraccionamientos de las deudas tributarias.
Ruiz Molina también ha comentado que la ampliación de los plazos de presentación y pago de las autoliquidaciones de los tributos que gestiona la comunidad autónoma aprobada en marzo ha permitido inyectar liquidez a la economía doméstica y facilitar el pago de las obligaciones tributarias en una situación excepcional, y su repercusión ha sido de 66 millones de euros al tiempo que ha beneficiado a unos 50.000 sujetos pasivos.
El consejero se ha referido asimismo a la aprobación, este jueves en el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha, de la Ley de Medidas Urgentes para la declaración de proyectos prioritarios, que contiene dos bonificaciones.
Una, ha explicado, es la de la tasa fiscal que grava las máquinas o aparatos de juego en un porcentaje equivalente al tiempo que estos establecimientos han estado cerrados, lo que de forma directa afecta a las 175 empresas operadoras de este tipo de máquinas y de forma indirecta a los más de 5.000 establecimientos de hostelería que tienen máquinas instaladas, con un impacto presupuestario de 9 millones de euros.
La otra tasa bonificada, ha continuado el consejero, es la de autorización de espectáculos taurinos, que se bonificará al 100 % un año.
FONDOS EUROPEOS PARA LA RECONSTRUCCIÓN
Por otra parte, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas ha planteado tratar en la Conferencia de Presidentes Autonómicos el reparto de los fondos europeos para la reconstrucción para analizar en qué manera las comunidades autónomas, que son las que gestionan el estado del bienestar, se benefician de dichos recursos.
Ruiz Molina ha respondido a preguntas de la prensa sobre el acuerdo en la aprobación de un fondo de reconstrucción en la Unión Europea para hacer frente a la crisis por la pandemia de coronavirus.
El consejero ha considerado un «éxito» la negociación del Gobierno de España que, según ha dicho, es «muy satisfactoria» para los intereses del país.
Ha apuntado que están a la espera de que se den a las autonomías las «cifras y los criterios de reparto» porque las comunidades autónomas están ya en el periodo de elaboración de los presupuestos regionales para 2021, también a la espera de que el Ministerio de Hacienda les comunique el volumen de las entregas a cuenta.
Mientras, ha continuado, en su departamento están viendo las necesidades de las consejerías para el año próximo, que se tendrán que cuadrar con la previsión de ingresos, y que tienen que servir para conseguir niveles de crecimiento anteriores a la crisis sanitaria de la COVID-19.