Síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico (MIS-C) así se denomina a la rara afección que parece estar relacionada el coronavirus. Precisamente, este síndrome ha provocado la muerte de un niño de 10 años en Wisconsin, Estados Unidos, según ha confirmado el Departamento de Servicios de Salud del Estado (DHS).
Es el primer fallecimiento registrado por este síndrome en el estado de Wisconsin. Al respecto, la directora de Salud Pública del Estado, Paula Tran, ha explicado que, «aunque los casos de covid están disminuyendo en todo el estado, todavía vemos niveles muy altos de transmisión en los 72 condados».
¿Qué es el síndrome inflamatorio pediátrico?
El MIS-C es una afección en la que «diferentes partes del cuerpo pueden inflamarse, entre ellas el corazón, los pulmones, los riñones, el cerebro, la piel, los ojos o los órganos gastrointestinales«, según detallan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
¿Qué lo causa?
Se desconoce lo que causa el MIS-C, pero sí se sabe que muchos niños con MIS-C «tuvieron el virus que causa la Covid-19 o han estado cerca de alguien con coronavirus». Asimismo, el MIS-C «puede ser grave e incluso mortal», pero desde agencia sanitaria de EEUU subrayan que la mayoría de los menores a quienes se les diagnosticó esta afección han mejorado con atención médica.
Factores
Un informe de Mayo Clinic, clínica médica dedicada a la educación y la investigación, determina que en EEUU se diagnosticaron más casos de síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico en niños de raza negra y latinos que en menores de otras razas y grupos étnicos.
No obstante, advierten que «se necesitan estudios para ayudar a determinar por qué el síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico suele afectar más a estos niños que a otros».
Mientras, los CDC continúan investigando sobre este síndrome inflamatorio y aunque son muchos los interrogantes aún por responder, aconsejan a los padres prestar atención si sus hijos presentan síntomas como fiebre persistente, dificultad para respirar, dolor en el pecho que no desaparece, confusión, incapacidad para mantenerse despierto, piel azulada o dolor abdominal intenso.