Una cuarentena larga de profesionales europeos vinculados al mundo de la cultura han firmado un manifiesto para reclamar ayudas al sector, ya que consideran que en esta crisis gravísima la cultura se ha convertido en la cenicienta.
Más de 40 intelectuales de 16 nacionalidades y diferentes disciplinas artísticas (escritores, músicos, directores de teatro y de museos, cineastas, compositores. fotógrafos y artistas plásticos) reclaman que se ponga en marcha un plan con el apoyo presupuestario necesario para el desarrollo del sector cultural y de entretenimiento. La iniciativa ha sido promovida por la CEPI (European Audiovisual Production) y la Asociación Estatal de Cine.
El documento, titulado “Una llamada para salvar el futuro de la cultura y el entretenimiento”, está firmado, entre otros, por los cineastas Isabel Coixet y el húngaro István Szabó; la cantante islandesa Björk, el compositor francés Jean-Michel Jarre, el productor Agustín Almodóvar y el fotógrafo Joan Fontcuberta.
El manifiesto “Una llamada para salvar el futuro de la cultura y el entretenimiento” vincula la cultura con la manera de ser europea
“La cultura europea está en medio de una crisis –arranca el manifiesto–. La manera en que los responsables políticos y sociales respondan ahora va a determinar el escenario para la próxima década de vida cultural y creativa en nuestra Unión. Desde el principio de la pandemia de Covid-19, los teatros, cines, museos, salas de conciertos y similares han permanecido cerrados. Muchos de esos lugares no volverán a abrir”.
Los firmantes apuntan que “el resultado ha debilitado a los sectores culturales y creativos, poniendo en evidencia la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran”. Y subrayan que “las industrias culturales y creativas representan un tercio de los empleos en Europa”.
La paradoja es que la cultura ha sido la tabla de salvación durante el confinamiento. y así lo recuerda el manifiesto: “La paradoja es que a pesar de tener un paisaje cultural tan disminuido, es en esa misma cultura en la que la sociedad se ha refugiado durante este periodo de gran adversidad social. Es la música que nos ha reunido en los balcones, y delante de películas o series de TV que nos han entretenido. Son los documentales, los libros, las actuaciones y el arte quienes nos han aliviado en nuestra soledad y nos han ayudado a escaparnos intelectual y creativamente”.
La paradoja es que la cultura ha sido la tabla de salvación de la sociedad durante el confinamiento
La cultura europea “es una cultura unida en su diversidad, una cultura que atrae millones de personas de todas las partes del mundo. La expresión cultural con toda su diversidad está en el corazón de lo que significa ser europeo”.
Los firmantes se lamentan que “a pesar de los claros mensajes de los dirigentes de la Unión Europea anunciando que nuestro sector sería firmemente apoyado, hoy vemos que las ofertas actuales para un plan de recuperación no nos tienen en cuenta, y que el presupuesto europeo extrañamente no considera las necesidades del sector cultural y creativo”.
Consideran que el sector necesita “un plan que permita revivir nuestro ecosistema cultural y que pueda inspirar a la próxima generación de europeos. Eso significa proveer los recursos financieros que permitirán que el arte, la cultura, y las empresas culturales y creativas, los creadores y los trabajadores creativos puedan seguir con su trabajo, para poder sobrevivir primero y desarrollarse en el futuro”.
Y concluye: “Esto es una oportunidad para la Unión Europea de demostrar ampliamente que puede honrar sus valores. Ha llegado la hora para Europa de ser ambiciosa e invertir en su futuro creativo. La cultura es una tierra fértil sobre la que la próxima generación se una y florezca. ¡Enseñemos a la próxima generación europea qué tipo de futuro le queremos ofrecer!
LOS FIRMANTES
La lista provisional, está abierta a más adhesiones, es la siguiente: Aga Zaryan (cantante de jazz, Polonia), Agnieszka Holland (cineasta, Polonia), Aga Zaryan (cantante de jazz Polonia), Agustín Almodóvar (productor cinematográfico, España), Alberto Guijarro (director del Primavera Sound y Sala Apolo, España), Alberto Iglesias (compositor de cine, España), Anne-Teresa De Keersmaeker (coreógrafa, Bélgica), Benny Andersson (compositor, Suecia), Bernie Sherlock (directora de orquesta, Irlanda), Björk (cantante y compositora, Islandia), Charles Sturridge (cineasta, Reino Unido), Dame Evelyn Glennie (percusionista, Reino Unido), Daniel Buren (artista conceptual, Francia), Isabel Coixet (cineasta, España), István Szabó (cineasta, Hungría), Ivo van Hove (director teatral, Países Bajos y Bélgica), Jaco Van Dormael (cineasta, Bélgica), Jean-Michel Jarre (compositor, Francia), Jean-Pierre y Luc Dardenne (cineastas, Bélgica), Joan Fontcuberta (artista y fotógrafo, España), Jean-Xavier de Lestrade (director, Francia), Lisa Kaindé Diaz Zayas y Naomi Diaz Zayas (cantautoras y compositoras, Francia), Marian Urban (guionista y productora cinematográfica, Eslovaquia), Marina Abramović (artista, US/Serbia), Martin Šulík (cineasta y productor, Eslovaquia), Maryla Rodowicz (cantante, Polonia), Michał Urbaniak (jazzman, compositor y productor, Polonia), Milo Rau (director teatral, Bélgica y Suiza), Mirga Grazinyte (directora de orquesta, Lituania/Reino Unido), MØ (cantautora y productora musical, Dinamarca), Moritz Eggert (compositor, Alemania), Nele Neuhaus (escritora, Alemania), Nicola Campogrande (compositor, Italia), Nina Bouraoui (escritora, Francia), Nina George (escritora, Alemania), Olga Neuwirth (compositora, Austria), Olivier Guez (escritor, Francia), Paul Dujardin (ceo y director artístico de Bozar, Bélgica), Phil Manzanera (compositor y guitarrista, Reino Unido), Salvador Sobral (músico, Portugal), Sebastian Fitzek (escritor, Alemania), Stijn Coninx (cineasta, Bélgica), Thomas Anargyros (productor, Francia), Tiago Rodrigues (escritor, director Teatro Nacional D. Maria II, Portugal), Tim Etchells (artista y escritor, Reino Unido), Yuval Weinberg (director de orquesta, Israel/Alemania).