40.000 sandías han ido directamente a la basura de un agricultor de Badajoz. Su cosecha se pudre al sol y se queda en el campo sin recoger, indica que no pueden competir con la que llega de Marruecos.
El problema es que la fruta que llega de Marruecos es más barata. Cientos de agricultores se encuentran desesperados porque no pueden ni cubrir sus gastos.
A 6 o 7 céntimos
«Yo he vendido mucha sandía a 6 o 7 céntimos. Así que no cubrimos gastos», explica un agricultor.
Los agricultores denuncian que las sandías que vienen de Marruecos son más baratas y que pasan menos controles fitosanitarios. Se trata de los métodos para la prevención, control y eliminación o curación de las enfermedades de las plantas. El objetivo es tener la fruta en buen estado para su venta.
La sandía es una fruta baja en calorías que ayuda a refrescar el organismo en tiempos calurosos, como son el verano. Por ello es una de las frutas más vendidas durante estos meses.
Debido al menor precio de las sandías en Marruecos, se importan miles de ellas para su venta en España. Esto ha provocado una reducción frente al nivel de cotización de la sandía. Se indica que el precio correcto para asumir los costes sería de 18 céntimos y no a los que los agricultores las venden ahora.
El otro problema es la demanda. Al tener sandías de Marruecos más baratas, provoca que la demanda de la sandía española se reduzca.