Santiago Abascal fue declarado en Ceuta como persona ‘non grata’. La votación salió adelante con 10 votos a favor, 4 en contra y 9 abstenciones.
La iniciativa del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) contó con el apoyo del PSOE y prosperó gracias a la abstención de dos diputados no adscritos ex de Vox y del Partido Popular (PP), que intentó sin éxito circunscribir la resolución a «rechazar» las palabras de Abascal por considerar que «son falsas, debilitan la unidad en la defensa del bien superior de nuestra españolidad, perjudican la convivencia y favorecen las infundadas tesis marroquíes».
Juan Jesús Vivas, presidente de Ceuta, ha justificado la abstención del PP en la declaración de ‘persona non grata’ al líder de Vox como una decisión «responsable» ante una formación que, según sus palabras, puso en «riesgo la convivencia» tras el «asalto» del pasado mes de mayo.
«No a los cordones sanitarios, nunca. Pero tampoco sí a los cordones sanitarios que establece Vox para poner en riesgo la convivencia de Ceuta, para incendiar Ceuta y dividir a ceutíes en la defensa de nuestra españolidad», señalaba el presidente de Ceuta, Vivas, en una entrevista en la Cadena COPE.
Vox da por rotas las relaciones con el PP
Vox da por rotas las relaciones con el PP por considerarle «cooperador necesario» para que Abascal fuera declarado ‘perona non grata’ en Ceuta y de que el presidente ‘popular’ de esa ciudad autónoma haya justificado esa posición.
«Consideramos que el PP, con su abstención, y con las declaraciones de Vivas ha roto relaciones con Vox, tomamos nota y damos las relaciones rotas», ha señalado el vicepresidente del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé.
Ahora, desde Vox creen que el PP debe reconsiderar su decisión y desautorizar «de algún modo» al presidente de Ceuta o, de lo contrario, «no va a poder seguir reclamando ayuda a Vox para sus propuestas en ayuntamientos o asambleas autonómicas».
El dirigente de Vox ha acusado al PP de hacerse «cooperador necesario» en la estrategia de «deshumanización» y «demonización» de su partido con esta decisión contra Abascal.