mensaje sospechoso en el perfil de Twitter del entonces candidato, y ahora presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, llamaba la atención sobre sus miles de seguidores: «Todo el bitcoin ingresado a la siguiente dirección será devuelto por duplicado». Un mensaje sobre el que muchos reaccionaron incrédulos porque, efectivamente, se trataba de una estafa. Ahora, se ha conseguido dar con el ‘hacker’ que manipuló las cuentas de Twitter de varios personajes públicos para estafar masivamente a sus seguidores.
Se trata de un joven británico de 22 años que ha sido detenido en España. Lo ha anunciado este miércoles el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que también ha desvelado su identidad. Se trata de Joseph O’Connor y ha sido arrestado en España por múltiples cargos.
Acusado de hackeo y ciberacoso a menores
El joven no solo secuestró la cuenta de Twitter de Joe Biden. También la del expresidente estadounidense, Barack Obama, la del consejero delegado de Tesla, las de los empresarios multimillonarios Bill Gates, Jeff Bezos, Elon Muskla u otro tipo de cuentas verificadas de la red social como la de la empresa de transportes Uber. Además, el ‘hacker’ también ha sido acusado de haber hecho lo mismo en otras redes sociales como ‘Tik Tok’ o ‘Snapchat’ y se enfrenta a un cargo por ciberacoso a un menor.
300 víctimas de la estafa
El presunto autor de los delitos utilizó las cuentas, a las que siguen millones de personas, para solicitar un pago de Bitcoin, la moneda digital, prometiendo a todo aquel que ingresase cierta cantidad de dinero en la cuenta correspondiente devolverlo multiplicado. «Voy a dar dinero por la situación de coronavirus a toda la comunidad. Todo el bitcoin ingresado a la siguiente dirección será devuelto por duplicado. Si mandas 1000 dólares, te devolveré 2000. Solo lo haré durante 30 minutos», decían algunos de estos mensajes.
Solo pudieron leerse durante un corto periodo de tiempo pero al menos 300 personas cayeron en la estafa que ingresaron más de 100.000 dólares en total.
El ciberataque llevo a Twitter a tomar medidas extraordinarias para impedir que algunas cuentas verificadas pudieran publicar mensajes durante varias horas hasta que se pudiese restablecer la seguridad de las mismas.