Ya era un dato confirmado que vida inteligente no había, pero Venus tampoco es habitable para otros organismos.
Para los científicos es obvio que dentro de nuestro sistema solar no hay vida inteligente, apartando la Tierra. Al menos en sus investigaciones, en cada cuerpo rocoso de nuestra región, no hay registro de tal evento. Sin embargo, igual estudian otros planetas para detectar la posibilidad de vida de microorganismo y organismos. Esto con la intención de predecir si existirá vida en un futuro o si en algún momento temprano de la existencia se llegó a desarrollar. Entonces, recientes datos descartan cualquier posibilidad de vida en Venus.
Información detectada en las nubes de Venus desestiman por completo que actualmente haya vida de organismos en este planeta. Aunque, siguen manteniendo la hipótesis que hace aproximadamente 700 millones de años sí hubo vida en Venus.
Venus es el segundo planeta más cercano del Sol. Por lo tanto, se deben imaginar como se desarrollan las condiciones atmosféricas en su entorno. Según las mediciones de datos de la sonda espacial Galileo y otras naves que han pasado cerca del planeta de tamaño similar a nuestro mundo especifican información de la temperatura y presión. En primer lugar, detallan que en la superficie de Venus hace aproximadamente 465 grados centígrados de calor. Mientras que, hay 92 veces más presión atmosférica que en la Tierra.
Pero, una información clave sobre la composición de sus nubes, fue lo que dio pie a los expertos a realizar los recientes hallazgos. El estudio citado por el portal mencionado fue realizado por científicos de la Queen’s University Belfast.
Las nubes de Venus
Afirman los científicos de la institución mencionada que en las nubes de Venus hay 100 veces menos agua disponible en su atmósfera de la que se necesita para que cualquier organismo sobreviva. Esto hace que el calor que ya tiene con la cercanía del Sol se intensifique y que sus cúmulos de nubarrón sean de ácido corrosivo.
De hecho explican en el estudio que un alto nivel de ácido sulfúrico es lo que reduce la posibilidad de agua en las nubes de Venus. “En nuestro estudio, analizamos la concentración efectiva de moléculas de agua que científicamente llamamos actividad del agua. No solo descubrimos que la concentración efectiva de moléculas de agua está ligeramente por debajo de lo que se necesita para el microorganismo más resistente de la Tierra, sino que es más de 100 veces demasiado baja”, dijo Dr. John E Hallsworth, autor del estudio.
Hallsworth es además profesor en la Facultad de Ciencias Biológicas de la Queen’s University de Belfast, y añade que las nubes de Venus “están casi al final de la escala y a una distancia infranqueable de lo que la vida requiere para estar activa”, sentencia.