noche del 23 al 24 de junio es la más corta del año. También la más mágica porque se celebra San Juan y en todo el territorio se encienden las hogueras, se piden deseos y se cumple con los rituales más famosos.
Esta es una fiesta cristiana, pero con tradición pagana. Los Celtas encendían hogueras para celebrar la llegada del solsticio de verano y los cristianos trasladaron este festejo al 24 de junio para que coincidiera con San Juan -en honor al nacimiento de San Juan Bautista-. Cuando nació San Juan, su padre Zacarías hizo una hoguera para que el Sol tuviera más fuerza.
El ritual de las hogueras se conserva hoy en día. El fuego simboliza protección y purificación y la costumbre de saltar siete veces las llamas en esta noche mágica proviene de antiguas civilizaciones que usaban este rito para alejar a los malos espíritus. También estaba relacionado con la prevención de epidemias por el poder antiinfeccioso del fuego.
Otra tradición, que aún se conserva en algunos lugares, vinculada con el fuego es la de que los estudiantes quemasen los apuntes de ese año académico para dejarlo atrás y comenzar una nueva etapa.
En España, la mayoría de lumbres se encienden a lo largo de todo el litoral, aunque hay zonas de interior en las que se hacen fuegos en las principales plazas o en montes autorizados. Los lugares que acogen a más visitantes en esta noche de San Juan son A Coruña, Ciutadella (Menorca), Tarragona, Málaga, Alicante, Tenerife y Barcelona.
También en la playa, pero esta vez en el agua, existe otro ritual que es el de saltar las olas. Cuenta la leyenda que si las mujeres saltan nueve veces las olas, de espaldas al mar, aumenta su fertilidad. Asimismo, existe otra tradición que es la de saltar tres veces las olas y pedir tres deseos, mientras te golpean los pies, para pedir salud. Además, son muchos los que se bañan en el mar esa noche para purificarse e inaugurar la temporada de baño.
Otra costumbre muy extendida es la de dejar a la intemperie, durante toda la noche, un recipiente con agua y rosas u otras hierbas aromáticas. Al día siguiente, hay que lavarse la cara con ese agua para purificarse y ganar belleza. El rocío de la noche de San Juan que cae sobre el recipiente se considera mágico.
En cuanto a los deseos de San Juan, los más comunes son los que tienen que ver con el amor, el trabajo o la salud. Para que se cumplan existen diversos ritos como el de quemar cada una de las peticiones escritas en papel, encender dos velas rojas junto al nombre de la persona amada para atraer su amor o colocar debajo de la almohada una ramita de hiedra con cera fría de una vela blanca para conseguir lo que se desea.
En 2020, San Juan no se pudo celebrar por la pandemia, pero en este 2021 se podrán hacer pequeñas celebraciones con restricciones.