- El director general de la Marina Mercante podrá levantar la prohibición a solicitud de Puertos del Estado
- El Ejecutivo ve «urgente y necesario» mantener ciertas medidas de contención y prevención
El Gobierno ha decidido mantener la prohibición de entrada a España de los buques de pasaje tipo crucero procedentes de cualquier puerto hasta la finalización de la situación de crisis sanitaria. El Ejecutivo considera que es «una medida proporcionada, objetiva y no discriminatoria, y que está en línea con el objetivo establecido por el Comité de Emergencias de la OMS de interrumpir la propagación del virus».
La Dirección General de la Marina Mercante ha dictado restringir la actividad de los buques de pasaje tipo crucero en los puertos españoles, según recoge este sábado el Boletín Oficial del Estado (BOE). «Se prohíbe la entrada en puertos españoles de los buques de pasaje de tipo crucero que realicen viajes internacionales y naveguen por aguas del mar territorial con objeto de entrar en los puertos españoles abiertos a la navegación internacional», expone la orden ministerial.
Sin embargo, el director general de la Marina Mercante podrá levantar la prohibición, a solicitud de Puertos del Estado y de acuerdo con el Ministerio de Sanidad, para entradas de buques concretas o para un conjunto de ellas como parte de un itinerario por uno o varios puertos.
Esta medida tendrá vigencia hasta la finalización de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19, de acuerdo el Real Decreto-ley 21/2020, de 9 de junio, para la ‘nueva normalidad’ que incluye de medidas de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria.
El Gobierno estima que es «urgente y necesario» el mantenimiento de ciertas medidas de contención y prevención ante los posibles riesgos que pudieran derivarse de la pérdida de vigencia automática de las medidas para la favorable evolución en el logro de los objetivos de contención de la pandemia, así como proveer un itinerario seguro hacia la recuperación del sector mediante la aplicación de procedimientos estrictos de control durante todo el proceso pero especialmente a bordo de los buques de pasaje tipo crucero, que permitan el restablecimiento seguro de estos servicios de carácter eminentemente turístico.