Los Erasmus agrarios aumentan en demanda

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Felipe Parreño y Daniel Ortega, los primeros conquenses que participaron en la primera edición, animan a tomar parte de esta experiencia que publica nueva convocatoria en mayo.

Tras el éxito de la primera convocatoria, el Erasmus agrario se consolida y aumenta la demanda para particiar en este programa que en 2020 puso en marcha la Unión de Pequeños aAgricultores (UPA) en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, con el fin de formar a los jóvenes en prácticas innovadoras que después pueden aplicar en sus explotaciones.

El proyecto planea ampliar este año su presupuesto inicial de 33.000 euros hasta el millón, noticia que anunciaba el Ministerio de Agricultura y recibía UPA “con ilusión” porque “hay cada vez más interesados en vivir esta experiencia porque adquieren formación que no está en los libros” explica Gema del Rio, miembro del gabinete técnico de UPA.

Y, aunque todavía no ha sido publicada la convocatoria para 2021 prevén tenerla lista para finales del mes de mayo, algo que permitirá realizar los intercambios de junio a diciembre y ampliar los plazos puesto que el año pasado se redujo a noviembre y diciembre.

EXPERIENCIAS

En la provincia de Cuenca dos jóvenes dedicados a las labores agrícolas y a la ganadería, Felipe Parreño y Daniel Ortega, respectivamente, son los primeros que participaron en el proyecto piloto conocido como Programa de Visitas Formativas de Jóvenes Agricultores a Explotaciones Modelo, ambos destacan lo positivo de esta experiencia por lo que animan a los jóvenes a que se sumen al nuevo programa.

Felipe Parreño, un joven de 23 años natural de Pozoamargo, viajó hasta Fuentes de Nava (Palencia) para conocer prácticas agroganaderas en una ganadería de ovino awassi para después aplicar sus conocimientos en la ganadería familiar que dirige junto a su familia.

Por otro lado, Daniel Ortega de 29 años proviene de Santa María de los Llanos y viajó hasta Belmonte del Tajo (Madrid), concretamente a una bodega. Ambos califican la experiencia de “muy enriquecedora”.

Daniel Ortega

“Un viaje necesario”, dice Daniel Ortega que se lleva de este viaje el intercambio de ideas y experiencias agrícolas que le han permitido conocer nuevos modelos de gestión. Por ello está dispuesto a repetir, “tanto si es dentro de España como a nivel europeo”, sostiene. Además, también le gustaría recibir a otros jóvenes en su finca para intercambiar conocimientos.

«Es una experiencia muy enriquecedora. Un intercambio de ideas y experiencias agrícolas que te permite conocer desde dentro otra provincia, sus gentes y su historia. Es un viaje necesario y a quienes estén pensando en participar les diría que sean todo lo curiosos que puedan, pues tienen la oportunidad de llevarse unos conocimientos inmensos», apunta.

Por su parte, Felipe Parreño conoció una nueva forma de emplear la leche de oveja para otras tareas que no sean simplemente la elaboración de queso manchego como ocurre en su ganadería familiar.

Felipe Parreño

La experiencia del Erasmus agrario le ha resultado muy positiva «porque te permite viajar a otras provincias para conocer nuevas formas de trabajar» po r lo que anima a otros jóvenes a partircipar en esta experiencia «porque aprendes muchas cosas y así puedes aplicar después esos conocimientos», reitera.

PRESTACIONES

El conocido como ‘Erasmus agrario’ incluye la subvención del transporte, alojamiento y manutención durante los 5 o 7 días que duren las prácticas y se da prioridad a la participación de las mujeres para poner en valor su trabajo en ese sector.

Así, para el agricultor que recibe al alumno también existen prestaciones y bonificaciones por participar en la iniciativa. Ante esto, “cuántas más personas participen mejor”, dice del Río, pues con estos proyectos se consigue el desarrollo del sector a través de una experiencia única e irrepetible.