Una tendencia al alza que las entidades auguran que seguirá así ya que, una vez superada la crisis sanitaria, la emergencia social persistir.
Un año después del inicio de la pandemia, la demanda de ayuda alimentaria en los bancos de alimentos de España se ha disparado un 50 %, una tendencia al alza que las entidades auguran que seguirá así ya que, una vez superada la crisis sanitaria, la emergencia social persistirá.
Con el objetivo de hacer frente a este aumento, la Fundación «la Caixa», CaixaBank y la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL) han presentado la segunda edición de la campaña solidaria «Ningún Hogar Sin Alimentos», que tiene como objetivo recaudar fondos para garantizar la alimentación básica de familias en situación de vulnerabilidad.
En 2020, los bancos de alimentos atendieron a medio millón más de personas que el año anterior: 1.560.000 personas en total, de las cuales más de 360.000 fueron niños.
Los bancos de alimentos, que han visto cómo el perfil de personas que acuden a pedir comida se ha diversificado, advierten de que la situación podría agravarse si no se produce una mejora de la economía cuando terminen las medidas excepcionales de protección social, como los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
«No sé cuánto subirá la demanda de alimentos, estamos seguros de que a finales de verano la subida será muy fuerte», ha pronosticado el director de la Fundación Banc dels Aliments de Barcelona, Lluís Fatjó-Vilas, que ha detallado que desde el mes de octubre están registrando un incremento mensual «considerable» de la demanda.