En pleno siglo XXI, un núcleo urbano diseminado de Santa Cruz de Mudela, conocido como Las Virtudes, sigue careciendo de dos servicios básicos: agua potable y alcantarillado. La Asociación de Vecinos Pro-Virtudes, que representa a los residentes de esta comunidad, lleva más de cuatro décadas luchando para que se haga justicia y se proporcione lo que consideran un derecho esencial.
Cuatro décadas de excusas y promesas incumplidas
Desde la Asociación Pro-Virtudes, denuncian que durante más de 40 años han recibido promesas vacías por parte de las instituciones. A finales de 2022, la nueva directiva de la asociación organizó una reunión en Ciudad Real con diferentes delegados de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y técnicos de la misma, en un esfuerzo por enfrentar el problema de la falta de infraestructura básica. En este encuentro, se aclararon algunos puntos que habían estado ocultos y se llegó a la conclusión de que una reforma puntual de las normas subsidiarias era el primer paso necesario para acceder a los fondos europeos destinados a la ampliación y mejora de las redes de alcantarillado.
Sin embargo, tras trasladar esta necesidad al nuevo alcalde con el cambio de legislatura, un año después, no se ha producido ningún avance. La asociación lamenta que este trámite administrativo, que no implica un coste económico, siga paralizado, lo que impide el acceso a fondos que podrían transformar la infraestructura local, como ya ha ocurrido en otros municipios donde se han destinado cientos de miles de euros.
Falta de respuesta de las instituciones
La Asociación Pro-Virtudes también ha manifestado su descontento con la Diputación, tras esperar durante un año una reunión para presentar sus demandas. Lamentan que la reunión fuera cancelada a última hora, lo que refuerza su sentimiento de olvido por parte de las instituciones. En este contexto de desatención, destacan que Las Virtudes es una parte pequeña pero importante del término municipal de Torre de Juan Abad, donde, según denuncian, la alcaldesa no ha respondido ni a llamadas telefónicas ni a correos electrónicos. La asociación califica de «indignante» la actitud de la alcaldesa, quien, según afirman, citó a la anterior directiva en el Ayuntamiento para posteriormente negarse a recibirlos, un gesto que consideran un claro atropello al decoro.
Un llamado a la dignidad y al derecho básico
La asociación insiste en que la falta de una red de alcantarillado en pleno siglo XXI no solo es un atraso, sino que es indigno para los residentes de Las Virtudes. Desde la Asociación Pro-Virtudes, recuerdan que este tipo de infraestructuras son fundamentales para garantizar una calidad de vida básica y que es inaceptable que, en una época en la que se habla de desarrollo y modernización, aún existan núcleos urbanos que carezcan de agua potable y alcantarillado.
Las Virtudes, situada en una zona de la España vaciada, parece estar doblemente olvidada, no solo por las instituciones locales, sino también por las provinciales y regionales, lo que refuerza el sentimiento de abandono de sus vecinos. La asociación sigue trabajando para que se reconozcan sus derechos y se tomen las medidas necesarias para poner fin a esta situación.