El Gobierno bloquea la declaración de emergencia y solo despliega a 1.600 militares para paliar los efectos de Filomena

pedro sanchez
pedro sanchez

El Gobierno sigue sin tomar una decisión sobre si declarar Madrid «zona gravemente afectada» por el temporal Filomena, zona catastrófica en su anterior definición y mientras solo ha desplegado 1.600 militares, alrededor de un 1,2% de los miembros de las Fuerzas Armadas, para colaborar en tareas de normalización por el paso del temporal Filomena, que se eleva al 2% si se toma en cuenta el número de efectivos del Ejército de Tierra.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha indicado que el Gobierno todavía no ha recibido oficialmente ninguna petición de ninguna administración pública pero también ha señalado que es algo que el Gobierno puede hacer por iniciativa propia.

Sin embargo, de momento no hay una decisión porque el ministro ha indicado que ha sido este martes cuando el Gobierno ha empezado a evaluar los daños que Filomena está dejando a su paso, por ejemplo, en Madrid, donde su alcalde, José Luis Martínez-Almeida, y la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, ya lo reclaman desde hace días. También Castilla-La Mancha se plantea ya pedir la declaración de zona catastrófica en su territorio.

Tal y como ha repetido el Gobierno desde entonces, la portavoz, María Jesús Montero, ha insistido en que no habrá una decisión hasta que no termine el temporal. «Hoy se ha empezado la evaluación de los daños hasta completar la totalidad de los mismos cuando pase definitivamente el temporal. Cuando estén contabilizados procederemos a aplicar la normativa correspondiente para poder resarcir a las personas que haya sufrido daños», ha dicho en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Nuevo choque Sánchez-Ayuso

La declaración de zona catastrófica en Madrid ha continuado este martes alimentando un nuevo enfrentamiento entre el Gobierno central y el de Díaz Ayuso. 

La presidenta madrileña dijo ayer que las ayudas y exenciones fiscales que comportaría no debían ser un problema para un «Gobierno manirroto» como el de Pedro Sánchez y este martes ha acusado al Gobierno central de guiarse por «motivos políticos» para frenar la declaración de zona catastrófica.

Tras reprochar a Ayuso que no diga que la Comunidad de Madrid es la que más se ha beneficiado, por ejemplo, del fondo autonómico de 16.000 millones por la pandemia, Montero ha acusado a la presidenta madrileña de buscar «constantemente» la confrontación con Moncloa para no responder por su trabajo. «La Comunidad de Madrid mira al Gobierno de España cuando no quiere dar respuesta de su gestión», ha dicho. 

La UME, a petición de las comunidades

Sobre los militares desplegados, son 1.600 militares los que actualmente colaboran en tareas de retirada de nieve, aseguramiento de los suministros o traslado de enfermos, según ha trasladado Grande-Marlaska en el informe que ha presentado en el Consejo de Ministros.

Según ha dicho, en estos momentos participan en estas labores 1.6000 militares, adscritos a la Unidad Militar de Emergencia (UME) y al resto de Fuerzas Armadas, en particular del Ejército de Tierra. Hasta este martes, ha habido «21 activaciones», 15 de ellas en la Comunidad de Madrid.

El ministro ha explicado que el despliegue de la UME se está produciendo a petición de las comunidades autónomas, de acuerdo a la ley de Protección Civil, que solo establece una circunstancia para que fuera el Gobierno central quien lo hiciera por cuenta propia, que las comunidades no estuvieran en condiciones de gestionar la situación. Según ha recordado, este caso solo se ha dado una vez, el pasado mes de marzo, cuando el primer estado de alarma por la pandemia convirtió al Gobierno central en la única autoridad competente.

«Dentro de las fases de emergencia de Protección Civil, la última es declarar la emergencia nacional y es una posibilidad que tiene el Ministerio del Interior«, algo para lo que tienen que darse «requisitos muy relevantes», ha explicado Grande-Marlaska. Es para los casos en los que la emergencia afecte «a casi todo el territorio nacional, en un número importante de comunidades y que en ningún momento las comunidades que deben gestionar la protección civil no tengan capacidad de gestión«, algo que el ministro ha descartado en el caso de Filomena.

«En estas circunstancias, la capacidad de gestión de comunidades como Castilla-La Mancha, Aragón, la Comunidad de Madrid, las más afectadas, quedaba adecuadamente garantizada», ha añadido.

Gratitud y orgullo

A pesar de que el número de militares que trabajan en estos momentos para normalizar la situación creada por el temporal son una parte mínima del número total, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no se ha resistido a visitar este martes la base de la UME en Torrejón de Ardoz (Madrid), para trasladar un mensaje de «gratitud y orgullo» por la labor que están desarrollando estos días, unidos a la que han desplegado durante los meses de pandemia.

«Si algo hemos aprendido con la pandemia y esta tormenta ahora es precisamente la importancia de unos servicios públicos de primera nivel y el sentimiento que tiene la ciudadanía es que las Fuerzas Armadas y el Ejército de Tierra, la UME y todo el Sistema Nacional de Protección Civil y los profesionales sanitarios, dando una respuesta eficaz y equitativa, sea a la tormenta o a la emergencia sanitaria», le ha dicho. «Lo estáis dando todo y por eso la sociedad os lo agradece todo», ha añadido el presidente junto a la ministra de Defensa, Margarita Robles.

Reducción de guardias civiles

En su recuento de los efectivos de las distintas instituciones públicas que trabajan para paliar los efectos del temporal, Grande-Marlaska también ha dejado constancia de una disminución del número de guardias civiles que ahora mismo están destinados a estas tareas. Según ha dicho, ahora son 28.000 miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, particularmente de la Guardia Civil, aunque «en algunos momentos han llegado a ser 48.000″. «Trabajan sin descanso desde el jueves en el alivio de las personas más vulnerables, asegurando los servicios o dando asistencia a los servicios de emergencia», ha dicho el ministro.

Según fuentes de Interior, no se trata de un repliegue de la Guardia Civil, sino de los 75.000 miembros que componen el Instituto Armado realizan «infinidad de funciones». Fue en el «punto más álgido» de la tormenta cuando se destinaron a Filomena 48.000 efectivos.

Según el informe de Grande-Marlaska al Consejo de Ministros, unos 1.600 miembros de la Unidad de Tráfico de la Guardia Civil trabajan en las carreteras además de 685 operarios de la Dirección General de Tráfico. Desde el viernes, han logrado «desembolsar» 311 camiones en 127 áreas de servicio.

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana tiene en funcionamiento 1.300 quitanieves y 3.000 operarios por todas las carreteras del país.