Unai Emery no contaba con él y en el Madrid querían una solución en este mercado de invierno. En Liga sólo ha sido titular en dos ocasiones.
Después de una excelente temporada con el Mallorca, en la que a pesar del descenso del equipo balear él fue el mejor futbolista del curso, Takefusa Kubo esperaba con ansias su cesión al Villarreal. Se trataba de un club con un modelo de fútbol que podía favorecer la proyección del mediapunta japonés, que a sus 19 años y por su condición de extracomunitario todavía no tenía sitio en la primera plantilla del Real Madrid. Además, el submarino amarillo disputaba la Europa League, lo que mejoraba la puesta en escena de un Kubo, que ya es estrella en Japón.
Pero en el Estadio de la Cerámica las cosas no han salido como el futbolista y el Madrid querían. Sus cuatro goles, cinco asistencias y 2.300 minutos en Palma se convirtieron en dos titularidades de trece posibles en Liga y un gol en la primera jornada de la Europa League, la competición donde más minutos ha disputado (cinco titularidades y 375 minutos, casi 100 más que en Liga) y en la que también ha sumado tres asistencias.
Unai Emery, en su primera aventura española tras pasar por Arsenal y PSG, no ha contado con regularidad con el asiático y el futbolista no ha podido darle la vuelta a su rol, a menos con el paso de las semanas. «Me confirmó que buscaba salida porque juega menos de lo que cree que tiene que jugar», declaró Emery hace unos días. «Nosotros en ningún momento hemos dicho que queremos que salga, pero a partir de ahí busco a los jugadores que piensan en el Villarreal. Su comportamiento es bueno y cuando ha tenido la cabeza en el Villarreal nos ha ayudado. Todavía le faltan cosas pero tiene potencial para seguir creciendo, con paciencia y acumulando minutos y experiencias. Pero él considera que en su situación necesita jugar más».
Su entorno y el Madrid comenzaron a trabajar en diciembre en una solución para el mercado invernal, con resultado positivo: Kubo, que lleva sin disputar ni un sólo minuto desde el Leioa – Villarreal del 16 de diciembre en Copa del Rey, jugará hasta final de temporada en el Getafe. Así lo ha anunciado el Madrid, consciente de la necesidad de buscar una alternativa a la situación de su joven estrella. En el Bernabéu tienen muchas esperanzas puestas en el futbolista, tanto deportiva como comercialmente, y se le quiere en un futuro a las órdenes de Zinedine Zidane.
En Getafe, Kubo se encontrará con un entrenador vertical y con carácter como Bordalás, necesitado de jugadores con más talento que los que tiene en plantilla. Los azulones llevan en caída libre desde la vuelta del fútbol tras el confinamiento, y ahora mismo están en la 16ª posición de la tabla, un punto por encima del descenso, y acaban de caer en Copa del Rey ante el Córdoba.
El técnico está apostando por un centro del campo formado por Arambarri y Maksimovic, fijos para él, con Cucurella, omnipresente, por la izquierda, y ha ido variando el ocupante de la banda derecha durante estos primeros meses de temporada. Ahí es donde tendrá que trabajar Kubo, que ya partió de esa posición en el Mallorca y en los minutos que ha tenido en Villarreal.