Este domingo marcará el final de la era de Xavi Hernández como entrenador del FC Barcelona, culminando un periodo de dos años y medio al frente del banquillo blaugrana. Tras el partido contra el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán, correspondiente a la última jornada de la liga, Xavi dejará de dirigir al equipo catalán.
Cambio de Dirección en el Camp Nou
La noticia fue confirmada este viernes por el club, en un comunicado donde se expresa que «el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha comunicado este mediodía a Xavi Hernández que no continuará como entrenador del primer equipo en la temporada 2024-25». Este anuncio llega a pesar de las declaraciones previas de continuidad, transformando radicalmente el panorama del banquillo catalán.
Un Giro Inesperado
Hace apenas un mes, tanto Laporta como Hernández habían anunciado la continuidad del técnico para la próxima temporada. Sin embargo, la situación dio un vuelco tras la derrota por 3-5 frente al Villarreal en enero, momento en el que Xavi anunció que dejaría su puesto al término de la campaña. Esta decisión subraya la volatilidad y la presión constante en los niveles más altos del fútbol profesional.
Legado y Futuro
Xavi Hernández, que asumió el cargo en noviembre de 2021, se despide del club que lo vio crecer como jugador y donde comenzó su carrera de entrenador en la élite. Durante su tiempo como técnico, Xavi buscó revitalizar el estilo de juego que hizo famoso al Barcelona, aunque con desafíos significativos en términos de resultados y consistencia.
El club ahora mira hacia un nuevo capítulo, con la tarea de encontrar un sucesor que pueda llevar al Barcelona a recuperar su lugar preeminente en el fútbol europeo. La marcha de Xavi cierra un capítulo importante en la historia reciente del club y abre una fase de incertidumbre y expectativa sobre lo que está por venir.
El último partido de Xavi como entrenador será una despedida cargada de emociones, tanto para él como para los aficionados, en un estadio que ha sido testigo de muchos de sus triunfos como jugador. Con su salida, el Barcelona se prepara para navegar por las aguas siempre turbulentas del fútbol de alta competencia, buscando un nuevo líder que pueda encarnar la filosofía del club y llevar a cabo la ardua tarea de reconstrucción.