Con la conmemoración del Día Internacional de las personas que padecen síndrome de fatiga crónica, fibromialgia, sensibilidad química múltiple o electrosensibilidad acercándose este domingo 12 de mayo, la asociación representante de estos pacientes en Castilla-La Mancha y en Ciudad Real ha intensificado sus esfuerzos para aumentar la conciencia y el apoyo público mediante su cuestación anual.
Visibilidad y Conciencia Pública
La presidenta de la asociación, Carmen Lozano, ha destacado la emergencia y el desconocimiento general que aún rodea estas enfermedades. «Son condiciones poco conocidas tanto en investigación como en atención sanitaria», explicó Lozano. Según ella, es esencial avanzar en la disponibilidad de recursos y herramientas necesarias para mejorar la calidad de vida de los afectados, que en Ciudad Real y la región son cada vez más numerosos.
Desafíos de Aislamiento y Apoyo Comunitario
Lozano también hizo hincapié en la difícil situación de aquellos que viven aislados debido a estas condiciones. Para combatir este aislamiento, la asociación ha lanzado un taller ocupacional con el apoyo del Ayuntamiento, destinado a ayudar a las personas afectadas a reintegrarse en la comunidad como parte de su terapia.
Compromiso Municipal y Apoyo Institucional
Las concejalas de Servicios Sociales y de Familia y Mayor, Aurora Galisteo y Milagros Calahorra, respectivamente, mostraron su apoyo durante la cuestación. Galisteo elogió a la asociación por su dedicación y compromiso con las necesidades de estos pacientes. «Es una joven asociación que trabaja incansablemente por defender y acompañar a las personas que padecen estos síndromes que complican significativamente sus vidas», afirmó Galisteo. Además, se comprometió a continuar respaldando los proyectos de la asociación para promover una mayor investigación de estos síndromes, asegurar una adecuada atención médica y sanitaria, y fomentar una mayor concienciación social.
Llamado a la Acción Comunitaria
La asociación continúa haciendo un llamado a la empatía y al apoyo de toda la comunidad, no solo para mejorar la comprensión y el tratamiento de estas enfermedades, sino también para integrar mejor a los afectados en la sociedad. Con la colaboración de las autoridades locales y el apoyo de la comunidad, se espera que se pueda mejorar significativamente el bienestar y la calidad de vida de estas personas en Ciudad Real y más allá.