En Castilla-La Mancha, la jornada se presenta con cielos predominantemente despejados, aunque no estarán exentos de algunos intervalos de nubes bajas durante las primeras horas del día en las zonas más elevadas de la mitad oriental. Este escenario matinal podría estar acompañado de brumas y posibles bancos de niebla, añadiendo un toque místico a las primeras horas del día.
Aunque la probabilidad es baja, no se descarta la aparición de precipitaciones débiles en las zonas montañosas del nordeste al amanecer, con una cota de nieve que nos hablará del cambio de estación, situándose inicialmente en los 900-1.200 metros pero ascendiendo a cotas más altas, por encima de los 1.500-1.700 metros conforme avance el día.
La nota característica de este martes será el descenso de las temperaturas mínimas, que podrían alcanzar los 7 grados en algunos puntos de la región, presentando un fresco amanecer para los castellanomanchegos. Por su parte, las temperaturas máximas experimentarán pocos cambios o un ligero descenso en el tercio occidental, mientras que el resto de la comunidad autónoma verá cómo los termómetros bajan de manera más notable, especialmente en el extremo sudeste, donde el descenso podría ser calificado de notable.
Este martes no estará exento de heladas débiles en las cumbres de los Sistemas Central e Ibérico, recordándonos que aún estamos en una época del año de transición climática. El viento, por su parte, soplará de flojo a moderado procedente del noroeste y norte, marcando el ritmo de un día que, aunque pueda comenzar con incertidumbre meteorológica, promete claridad conforme se disipen las nubes y brumas matinales.
En cuanto a las temperaturas específicas por capitales de provincia, oscilarán entre los 10 y los 17 grados en Albacete, 8 y 17 en Ciudad Real, 7 y 14 grados en Cuenca, 8 y 16 grados en Guadalajara y entre 8 y 16 grados en Toledo. Un abanico térmico que invita a la población a no guardar aún la ropa de abrigo, especialmente durante las primeras y últimas horas del día.