2020 será uno de los tres años más calurosos en más de un siglo y medio de medición científica de las temperaturas, tal y como ha advertido este miércoles la Organización Meteorológica Mundial (OMM), que también ha alertado sobre un aumento sin precedentes del deshielo en el Ártico.
La temperatura media mundial, según cálculos del organismo, será en 2020 hasta 1,2 grados centígrados superior a la de los niveles preindustriales, una cifra similar a la de 2019 y sólo superada por 2016, el año más caluroso de la historia, en el que el fenómeno del Niño contribuyó a una subida de temperaturas. Asimismo, se confirma que la década 2011-2020 ha sido la más cálida de la que se tiene registro.
Las cifras se publican en el informe preliminar de la OMM sobre el estado del clima en 2020, aunque los resultados definitivos se conocerán en marzo, cuando se confirmará definitivamente si este año será el segundo o el tercero más caluroso de la historia moderna, ya que actualmente está prácticamente empatado con 2019.
2020 ha presentado así una alta temperatura media, a pesar de que durante este año se diese el fenómeno de la Niña que suele conllevar un enfriamiento de las temperaturas y que la pandemia de Covid-19 tuvo entre sus consecuencias una fuerte reducción del tráfico aéreo, un sector con alta emisión de gases de efecto invernadero.
La región donde el calentamiento global fue más patente en 2020 fue el norte de Asia, en particular el Ártico siberiano, donde las temperaturas medias superaron en más de cinco grados la media registrada entre 1981 y 2010.
La OMM también ha advertido que, si bien el hielo antártico se mantuvo estable, el del Ártico alcanzó su segundo valor más bajo en 42 años, y sólo en Groenlandia se perdió una masa helada de 152.000 millones de toneladas.