52 votos favor, 298 en contra. Insultos, descalificaciones y cero propuestas. Esa era conclusión de los politólogos y analistas sobre el discurso del líder de Vox, Santiago Abascal para defender su moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Y los resultados de las votaciones han desvelado que en este plan Abascal se ha quedado solo. Su grupo parlamentario es el único que le ha apoyado. Pero eso ya se lo temía Abascal que lo que ha pretendido es dar visibilidad a su formación frente al PP en una moción de censura que parecía más dirigida a Casado.
Así que no es de extrañar que este jueves Pablo Casado haya sido tan duro con Vox y haya subido a la tribuna del Congreso para finalmente aclarar el voto del Partido Popular: no. Y lo ha hecho porque considera que Sánchez y Abascal comparten este desgarro nacional, que son los mejores aliados y que Abascal no es el presidente que necesita España.
La segunda jornada ha tenido momentos emotivos como el aplauso a la diputada Aína, de vuelta tras un cáncer, o la emoción de Espinosa de los Monteros al recordar los duros momentos de la familia de Abascal, amenazada por ETA. Y ha servido para que Sánchez retire su idea de reformar el CGPJ cambiando las mayorías, algo que tampoco buscaba Europa.
La moción de la extrema derecha, que la Cámara baja empezó a votar pasada la una y media de la tarde, no prosperó y se limitó a cosechar los apoyos de los 52 diputados de Vox. Se quedó lejísimos de la mayoría absoluta que la Constitución exige para desalojar al Gobierno del poder: 176 escaños. Incluso la diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo, que había defendido la abstención, cumplió con la disciplina de voto y dijo ‘no’.
Ha sido la censura con menos apoyos de la historia. La liderada por Unidas Podemos, en 2017, logró 82 ‘síes’. La anterior, 30 años antes, en 1987, la que tenía al popular Antonio Hernández Mancha como candidato, 66. Y la primera de la democracia, la de 1980, la que enfrentó a Felipe González contra Adolfo Suárez, recabó 152 votos afirmativos. La única que resultó ganadora fue la de hace apenas dos años, la que hizo a Pedro Sánchez presidente y tumbó a Mariano Rajoy: conquistó 180 votos, cuatro más de la mayoría absoluta.
Abascal dice que mejor solo que mal acompañado
«Hoy se han juntado todos para vencer a Vox, no será la primera vez ni la última. Pero no lo celebren mucho porque dentro de poco estarán disputando por los despojos de poder que hoy disfrutan», ha dicho desde la tribuna del Congreso antes de la votación. Abascal ha apuntado que el Congreso de los Diputados debía este jueves elegir «entre la esperanza y la ruina» y la lamentado que haya elegido «ruina». Pero ha advertido de que no acabarán con la esperanza que «cada día vence» en numerosos rincones de pueblos y ciudades españolas.
Tras haber escuchado durante dos jornadas el rechazo de todos los grupos parlamentarios a su moción de censura, Abascal ha insistido en que prefiere quedarse solo que mal acompañado. Y en concreto ha señalado a los partidos que apoyaron la investidura del Gobierno de coalición y a Bildu.
También ha criticado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recurra al argumento del franquismo para debatir con él. «Es su único argumento, ha pasado de profanador a necrófilo. Sin Franco no son nada», ha lamentando avisando a Sánchez de que sus intervenciones «rebajan el nivel del debate parlamentario».
El líder del PP, Pablo Casado, abría este jueves su discurso en el Pleno del Congreso cargando contra la moción de «impostura» que ha presentado Vox contra el Gobierno de Pedro Sánchez, una iniciativa que, según ha dicho, les hace «perder el tiempo» en plena oleada de coronavirus. «Para este viaje no hacían falta tantas alforjas», ha denunciado Casado, en un duro discurso contra el líder de Vox por querer «engañar» a los ciudadanos con esta iniciativa y llevar res meses «atacando» al PP «para nada». «Mucho ruido y pocas nueces», ha apostillado señalando que Vox lo único que hace es garantizar una victoria perpetua a la izquierda. Casado ha dejado en evidencia los datos y votos de Vox frente al PP.
«Usted juega al mismo juego que Sánchez, son ustedes la derecha que más gusta a la izquierda. Hoy se censura usted a sí mismo, ha puesto a los españoles en manos de Sánchez, porque cree que así se lanzarán a las suyas. Sí, Sánchez es el peor presidente en 40 años y el que peor ha afrontado la economía y la pandemia. Pero usted quería a Sánchez de presidente, no a mí.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha descalificado la moción de censura de Vox, que a su juicio es una mentira más para que Pedro Sánchez siga en la Moncloa», y también a su candidato, Santiago Abascal, de quien ha dicho que «quería cortar las dos orejas al PP y ha acabado de monosabio de Pablo Iglesias». A su juicio, la moción de censura de Vox no se presenta contra el gobierno de coalición, sino contra el PP, y se le ha vuelto en contra ya que Abascal ha actuado como «el doctor Frankenstein reviviendo a la criatura».
«Sánchez saldrá de este coso a hombros de los diputados de Vox y con su tendido ovacionándole. Vaya capote le ha echado y vaya bajonazo con el que remata la faena: quería cortar las dos orejas del PP y ha acabado de monosabio de Iglesias», ha sentenciado.
Casado ha justificado su decisión no entrar hasta ahora en las «provocaciones» de Abascal porque, según ha dicho, no quería abundar en su «estrategia corrosiva» para España, pero tras constatar que el verdadero objetivo de la moción de censura es su partido, ha optado por cambiar de opinión.
«Esta moción dispara contra el partido que le ha dado trabajo 15 años y lamento decirle que el tiro le ha salido por la culata. Acepto el órdago, es hora de poner las cartas boca arriba. Hasta aquí hemos llegado», ha advertido.
Abascal dice a las mujeres de Unidas Podemos si reciben órdenes del macho alfa Iglesias
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha preguntado este jueves a las cuatro diputadas de Unidas Podemos, que se han repartido el turno para rebatir la moción de Vox, si han salido a la tribuna para hacer «una caricatura de un personaje machista» y si lo han hecho por orden del «machito alfa», en alusión a Pablo Iglesias.
En su intervención, Abascal, que ha respondido así a las diputadas Sofía Castañon, Lucía Muñoz, Aina Vidal y Roser Maestro, ha tildado la intervención «solo de mujeres» como una performance organizada por Iglesias para hacer una caricatura de Vox y tildarlo de machista y ha lamentado que las hayan utilizado de «figurantes», de «floreros» para «degradar» a la mitad de la Cámara. Abascal ha advertido a las diputadas que no representan a las mujeres porque la gran mayoría de mujeres de España «no asalta capillas, no insulta ni agrede a policías, ni va pidiendo por la calle la muerte de la gente (Madrid será la tumba de Abascal) ni van gritando groserías (una copa menstrual en la boca de Abascal)».
El líder de Vox ha preguntado a las diputadas si también a ellas «les custodia (Iglesias) la tarjeta del móvil» o «cuando va a negociar los dineros con Irán ¿las llevan con velo o ni siquiera las invitan?«. «Avanzan a una república feminista sin el aplauso del presidente de Gobierno», les ha advertido el líder de Vox, que ha admitido que no le ha gustado lo que las diputadas han dicho de su persona y ha lamentado que las «utilicen» para atacar a su formación.
El líder de Vox ha reprochado a las diputadas que hagan esas caricatura de Vox y de su posicionamiento sobre la violencia de género y les ha recordado a el PSOE, su socio de Gobierno, es el único que ha mantenido en su cargo a un condenado por violencia contra su mujer y aquí ha citado a Jesús Eguiguren, presidente del PSE-PSOE «y artífice de las negociaciones del Estado con ETA».
Y sobre el terrorismo, ha recordado a su padre, miembro del PP y posteriormente de Vox, a quien acompañaba a las 8:30 de la mañana todos los días a levantar la persiana de su comercio, en Amurrio (Álava), «porque sabía que lo iban a matar, sus socios».
Abascal ha reprochado a las de Unidas Podemos que los llamen «clasistas» cuando se negaron a apoyar una propuesta de Vox para que fueran gratis las mascarillas y les ha dicho que «clasista y machista» es no pagar la Seguridad Social a tu asistencia, en referencia a la contratación irregular de un asistente por parte de Pablo Echenique
Duro enfrentamiento entre Vox y Podemos
La portavoz adjunta de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Sofía Castañón, ha definido este jueves a los dirigentes de Vox como «unos pijos herederos del expolio franquista, jugando a ser franquistas» y les ha acusado de ser ridículos y al mismo tiempo peligrosos. Con la intención de confrontar el discurso «machista» de Vox, el grupo parlamentario de Unidas Podemos ha decidido que fueran cuatro de sus diputadas -Sofía Castañón, Lucía Muñoz, Aina Vidal y Roser Maestro- quienes respondieran este jueves al candidato Santiago Abascal en el debate de la moción de censura contra Pedro Sánchez.
Pues así podrían contraponer el proyecto «de odio» que en su opinión defiende Vox para España con la «república feminista» hacia la que Castañón asegura que avanza el país. «Este Gobierno camina con paso firme y gafas violetas y pañuelos verdes y consciencia de clase», ha defendido.
«No les gusta nada de España, no les gustan sus lenguas, su diversidad, sus barios, sus culturas», ha reprochado la portavoz adjunta de Unidas Podemos, que ha acusado a Vox de no traer ni una sola propuesta al Parlamento y de defender un discurso como lo haría en «la barra del bar».
Y ha reivindicado, frente a las quejas de ayer de Vox, que los diputados van «vestidos con toda la dignidad» a representar en el Parlamento a los ciudadanos, a quienes -aseguran- no les preocupa su atuendo, sino su trabajo.
«¿Han levantado alguna vez una persiana? ¿Saben lo que pesa?», se ha preguntado Castañón, que ha afeado a Vox que se muestre más preocupado por la vestimenta de los diputados que por apoyar y defender iniciativas que mejoren sus condiciones laborales.
Sofía Castañón ha considerado que la defensa de la libertad de Vox consiste en asegurarse de que no les toquen ni uno solo de sus privilegios, pero ha puesto el acento en que lo verdaderamente preocupante no son ellos, sino «la foto de Colón» que se hicieron con el PP y Ciudadanos, con quienes gobiernan.
Por su parte, la diputada de En Comú Podem Aina Vidal, que ha regresado al Congreso tras su baja por un cáncer, ha denunciado que el proyecto de país de Vox son el “odio, la desconfianza y el egoísmo” y que con su moción buscan “bronca y ruido” y envenenar el cerebro de los españoles para que desconfíen de su parlamento, con un “respeto” a España que en realidad es “más autoritarismo” y “odio al diferente”.
Además, ha acusado a la derecha de “deslealtad y traición” y de buscar en la Unión Europa “perjudicar los intereses de España”, ya que, si no gobiernan, desean a España “cualquier tipo de calamidad”, porque la “derecha con sentido de país la está ejerciendo la CEOE”. “Ninguna distracción, próxima estación: presupuestos”, ha exclamado.
Roser Maestro, de IU, ha considerado que Vox trajo ayer al Congreso el curso de «primero de fascismo» y por su discurso considera que «no son dignos de ser españoles». «Se dedican a la confrontación y la riña», ha lamentado. La diputada Lucía Muñoz, de Podemos, ha defendido que la moción no es de censura sino de “destrucción” y ha situado a Vox en el “fascismo”. “La mayoría de la gente siente pavor solo con imaginar a Ortega Smith como ministro de Sanidad”, ha recalcado.
Sánchez a Abascal: Se ha quedado usted solo
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recalcado este jueves que el líder de Vox, Santiago Abascal, se ha «quedado solo» porque ninguna formación ha apoyado la moción de censura que ha presentado para desalojarle de La Moncloa: «Usted no es el salvador de España», ha enfatizado. Así lo ha asegurado Sánchez, poco antes de la votación de la moción de censura, confesando que era un «alivio» que nadie fuera a secundar la iniciativa de Vox y que, pensaba, que así lo sentía también el propio Abascal. «Usted está solo», le ha restregado al líder de Vox, a quien también le ha afeado que «le sobra orgullo y le falta modestia».