cerca de apagarse, según vaticinan algunos expertos, que empiezan a ver al volcán perdiendo muchísima energía, hasta el punto de que se cree que la erupción terminará antes de que acabe también 2021.
Ahora, una treintena de familias residente en Los Llanos de Aridane ha podido regresar a sus casas tras mes y medio evacuados por la erupción. Reconocen que quieren volver pero que tienen cierto miedo en su regreso, a causa de que el volcán sigue activo y temen que les pueda ocurrir algo.
Hay quienes optan por acudir a sus casas para limpiarlas de la abundante ceniza que cubre su interior, dado la inmensa expulsión que ha habido de las mismas por parte del volcán a lo largo de estas doce semanas y que ha llegado a cubrir regiones enteras de ceniza, sepultando casas de las que solo podía observarse el tejado por medio de una vista aérea.
La erupción más grande de Canarias
Nunca ningún otro volcán había permanecido tanto tiempo activo en las Islas Canarias. En este caso, lleva ya 82 días expulsando lava, aunque es cierto que el ritmo de la erupción ha descendido considerablemente en los últimos días. La fuerza volcánica ha remitido y los expertos ya calculan que es cuestión de pocos días que la erupción empiece a cesar su hostilidad.
Mientras tanto, los vecinos de La Palma esperan con angustia a que esta pesadilla termine. Los hay que desean regresar a casa y también hay quienes buscan un remedio para salir adelante al haber perdido todo cuanto tenían.
En este último caso, siguen las reclamaciones al Gobierno de España por las ayudas prometidas para los damnificados, que, en muchos casos, siguen sin llegar, y ya empiezan a desesperar a los vecinos. El Ministerio del Interior habilitó hace ya semanas un formulario en su página web para solicitar las ayudas prometidas, aunque se necesitaban cumplir una serie de requisitos.