Por Álvaro del Castillo
En Puertollano, hay cosas que cuesta entender. Una de ellas, cada vez más, es la factura del agua. No por el agua en sí, sino por el cúmulo de impuestos, tasas, cánones y cálculos que nadie sabe explicar… pero que todos tenemos que pagar.
Y ahora, tras una denuncia ciudadana hecha pública en redes sociales, empieza a extenderse la sospecha de que algo no se está haciendo bien. O, peor aún, que algo se está haciendo demasiado bien… pero solo para las arcas de la empresa que gestiona el servicio.
Un cálculo sospechoso que favorece a la empresa
La chispa la ha encendido un vecino que ha hecho públicos los detalles de su factura, asegurando que se le ha aplicado mal el tramo de consumo. En concreto, denuncia que, habiendo consumido 25 metros cúbicos, en lugar de aplicarle 20 m³ al tramo barato y 5 al tramo caro (como correspondería), se le aplican solo 19 en el primer tramo y 6 en el segundo. Un error milimétrico… pero con impacto directo en el bolsillo del ciudadano y beneficio para la empresa.
Y no es un caso aislado. Tras su publicación, docenas de vecinos han salido a decir que les ha pasado lo mismo: cobros duplicados en menos de 30 días, facturas infladas, importes que no se entienden, tramos mal aplicados, agua no consumida que se factura igual, subidas inexplicables, y una pregunta que sobrevuela en cada comentario:
¿Nos están metiendo la mano en el bolsillo sin que nadie diga nada?
¿Dónde están las explicaciones? ¿Y los responsables?
A estas alturas, nadie del Ayuntamiento o Aguas de Puertollano ha dado una sola explicación. Ningún comunicado. Ninguna aclaración. Nada.
Y eso es lo que más duele. Porque aunque esta denuncia haya surgido en redes sociales y no tengamos aún certeza de que se trate de un caso generalizado, el clamor popular ya es demasiado fuerte como para seguir ignorándolo.
¿Tanto cuesta salir y aclarar si se están aplicando bien los tramos? ¿No es esto una cuestión de transparencia básica? ¿Quién controla a Aguas de Puertollano S.L.? ¿Hay algún tipo de supervisión o simplemente se factura como les viene en gana?
Porque si los cálculos están mal y eso beneficia a la empresa y perjudica a los ciudadanos, estamos ante una irregularidad grave, ya sea por error o por negligencia. Y si están bien, pues que lo expliquen con papeles y no con silencios.
El peso insoportable de los «otros conceptos»
La otra gran queja que ha salido a la luz en esta tormenta ciudadana es el peso brutal que tienen los impuestos y conceptos añadidos en la factura.
Gente que paga 45 euros por un piso vacío, o 51 euros por un consumo de solo 23. Vecinos que aseguran que más del 60% de la factura es «paja» administrativa: canon de CLM, cuotas fijas, tasas de depuración, tasas por consumo… ¿Estamos pagando agua o financiando una red de despachos?
Esto no es nuevo. Pero ahora, con la nueva aplicación del canon DMA de Castilla-La Mancha, la presión ha subido aún más. Y muchos vecinos se preguntan: ¿hasta cuándo vamos a tener que asumir el coste de una gestión que no elegimos y de un servicio que no se fiscaliza?
Ayuntamiento: ¿vas a hacer algo o seguirás mandando cartas para culpar a otros?
Hace apenas unos días, el Ayuntamiento de Puertollano envió a los vecinos una carta explicando que el canon nuevo viene «impuesto» desde Toledo, por el Gobierno regional de García-Page. Y está bien señalarlo, claro que sí. Pero no basta con señalar.
Porque el ciudadano no solo quiere saber de quién es la culpa. Quiere soluciones. Y quiere respuestas.
¿Quién está vigilando cómo se factura el agua en Puertollano? ¿Quién revisa si se están aplicando correctamente los tramos, los importes, las fechas? ¿O estamos en manos de una empresa que hace y deshace sin que nadie del Ayuntamiento levante una ceja?
Si el Ayuntamiento recauda, factura y firma convenios… entonces el Ayuntamiento también debe responder. Porque lo que no se puede hacer es enviar cartas para culpar a la Junta y, mientras tanto, mirar para otro lado cuando los vecinos denuncian cobros indebidos.
Una ciudadanía harta de ser el cajero automático de los errores ajenos
Los vecinos de Puertollano están hartos. Y con razón. Se hartaron con el Clime, con la basura, con la zona azul, con las obras del Paseo del Bosque, con los taxis, con el agua… y ahora, se hartan de que nadie les escuche cuando denuncian irregularidades.
No se trata solo de la factura del agua. Se trata de una sensación creciente de abandono institucional. De que, si no se protesta en redes, nadie hace nada. De que el Ayuntamiento solo actúa cuando ya es demasiado tarde y el cabreo ciudadano lo desborda todo.
Reflexión final: el agua es un derecho, no un negocio opaco
No se puede jugar así con la confianza de la gente. No se puede seguir cobrando en automático, sin dar la cara. Y no se puede esperar que todo se resuelva solo porque la gente se canse.
El agua es un bien esencial. Y con eso no se juega. Señor alcalde, señor concejal de Hacienda, señores del equipo de gobierno o de la empresa Aguas de Puertollano S.L.: si lo que se denuncia es falso, salgan ya a explicarlo. Y si es cierto, corrijan de inmediato y pidan perdón.
Pero no sigan callados, la comunicación, aunque a algunos no les parezca importante, sí lo es. Porque el silencio, a veces, también se cobra. Y esta ciudad ya está pagando demasiado.
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