El mango y la piña son dos frutas tropicales que funcionan estupendamente juntas o por separado. En este caso vamos a elaborar una tarta de fruta fresca intentando conservar todas las propiedades de las frutas. El mango tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud, es bajo en calorías y rico en vitaminas. La piña es una fruta deliciosa si se toma en su punto óptimo de maduración. Rica en fibra y muy diurética es un aliado indispensable en cualquier dieta. Para esta tarta vamos a hacer una masa sablé o masa de galleta muy rica que se puede hacer con o sin huevos. De relleno hemos optado por una crema pastelera o más bien una crema de vainilla pero se puede sustituir por el relleno que más nos guste. Una buena opción también es el merengue o incluso hacer un mouse con el mango.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora
- Raciones: 10
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías: 438 Kcal por ración
Ingredientes de la tarta de mango y piña para 8 personas
- 1 mango
- 3 rodajas de 1,5 cm de piña natural
Para la base de la tarta:
- 300 g de harina
- 100 g de azúcar
- 100 g de mantequilla en dados
- 1 chorrito de leche
- 1-2 yemas de huevo
Para la crema:
- 3 huevos
- 500 ml de leche
- 60 g de azúcar
- 1 cucharada de maicena
- Canela
- 1 cucharadita de vainilla
Cómo hacer la tarta de mango y piña
Para hacer esta tarta de mango y piña no es necesario invertir mucho tiempo. Es más bien cuestión de organizarse y seguir los pasos de la receta en el orden adecuado. Es una receta muy sencilla y lo ideal es hacerla y consumirla en el día aunque se puede guardar durante un día o dos en la nevera.
Para hacer la base de la tarta ponemos en el robot o en un bol los ingredientes para hace la masa. Trituramos el azúcar y le incorporamos el resto de ingredientes para la masa. La masa se puede hacer con huevos o sin huevos. Si no ponemos la llema de huevo podemos añadir un poco más de mantequilla.
Los mezclamos y amasamos brevemente, hacemos una bola para envolverla en papel film y dejamos que enfríe y repose unos 40 minutos en la nevera.
Mientras la masa de la base de la tarta se enfría hacemos la crema. En una cazuela calentamos la leche con la canela sin que llegue a hervir y en un bol batimos los huevos con el azúcar. Diluimos la maicena en un vaso con un poquito de la leche. Se mezcla la leche a chorrillo con los huevos y el azúcar y se devuelve de nuevo al fuego en la cazuela a una temperatura media. No dejamos de remover para que no se pegue y cuando empiece a espesar retiramos cuando creamos que es suficientemente espesa la crema. La retiramos del fuego y la pasamos a una manga pastelera. Dejamos que enfríe a temperatura ambiente y si queremos después la metemos un poco en la nevera.
Cuando la crema está lista sacamos la masa de la nevera y con ayuda de un rodillo la estiramos. Marcamos con el molde y recortamos, será la base de la tarta. Con lo restante haremos las paredes del molde. Una vez hemos puesto la base en el molde se pinta con huevo y se mete al horno precalentado a 180 ºC-200 ºC y dejamos que se haga unos 15-20 min. Para que la masa no suba tenemos que pincharla y utilizar una harina de repostería libre de levadura.
Pelamos el mango y lo cortamos en cuadraditos. Lo reservaremos para el momento del montaje.
Hacemos lo mismo con la piña. Si tenéis un cuchillo de sierra facilita bastante la tarea a la hora de cortar y pelar la piña. La reservamos para la hora del montaje.
Para montar la tarta rellenaremos la base de la tarta con la crema y sobre esta le podemos poner las frutas mezcladas. El mango y la piña funcionan muy bien en conjunto. Es una tarta ideal para que los más pequeños coman frutas. Para los adultos se puede empapar la base de la tarta con un poco de triple seco tipo Cointreau o licor de naranja. Cuando termina el cocinado de la base de la tarta sacamos el molde del horno y le quitamos el molde dejando la base, habrá que esperar a que se enfríe la base para llevar a cabo el montaje de la tarta.
Para presentarlo cortamos la tarta en porciones. Hay que tener cuidado para que no se rompa la galleta al cortarla. Es un postre delicioso, el perfecto broche a una comida o una cena, incluso podemos tomarlo como merienda. Lo que sí es importante es que hay que comerla en el día.
Resumen fácil de preparación
- Preparar la base de la tarta, mezclar los ingredientes en un robot o un bol, amasar brevemente y refrigerar la masa durante al menos 30 minutos
- Hacer la crema para el relleno de la tarta y reservar para el montaje en una manga pastelera
- Cortar las frutas en dados
- Sacar la masa de la tarta, estirar con el rodillo y forrar el interior del molde con ella
- Precalentar el horno
- Hornear unos 15-20 minutos a 180 ºC-200 ºC
- Sacar la masa y dejar enfriar por completo. Desmoldar la base
- Rellenar la base de la tarta con crema y en la parte superior pondremos las frutas en cuadrados. Si las apretamos un poco con la mano podemos incrustarlas un poco en la crema
- Consumir en el mismo día