Partidos políticos de todos los colores, empresarios, autónomos, sindicatos, instituciones universitarias, organismos públicos y otras entidades civiles han unido sus fuerzas para forjar entre todos una estrategia común capaz de sacar a Sevilla de la crisis provocada por la pandemia. El resultado es la Alianza para la Reactivación Social y Económica de Sevilla, que tendrá vigor hasta 2023, un documento que pivota sobre diez estrategias y que cuenta con 230 medidas, resultado de la reorientación del Plan Estratégico Sevilla 2030. Estas son las medidas más significativas con las que la ciudad espera atender las necesidades más urgentes de los sevillanos.
Ciudad cuidadora
La primera estrategia, con 16 medidas, se centra en la salud, con iniciativas como el establecimiento de un protocolo de desinfección de espacios públicos; el seguimiento de las residencias de mayores y personas con diversidad funcional; la implantación del teletrabajo; y el impulso de espacios seguros para el peatón.
Estado del bienestar
Entre las siete medidas que contempla esta estrategia destacan corregir el déficit de servicios públicos esenciales; reforzar la atención domiciliaria; mantener los programas de garantía alimentaria; y potenciar la formación para el empleo en los planes para las zonas desfavorecidas.
Actividad económica
En este punto, se da prioridad a los proyectos de movilidad sostenible, lucha contra el cambio climático y mejora de las condiciones de vida, con un impulso al Puerto, la Zona Franca y el Parque Tecnológico Cartuja, ligando las ayudas al mantenimiento del empleo y con un plan especial para dinamizar el comercio local, los mercados de abasto, la cultura, la artesanía, la moda y los parques industriales.
Los empresarios, además, se han comprometido a incrementar los planes de formación para las microempresas, pymes y autónomos y a crear un grupo de Embajadores de Sevilla de ámbito empresarial.
Inversión pública
La alianza recoge la petición al Gobierno central y a la Junta de un programa de inversiones públicas en Sevilla, así como que la ciudad sea beneficiaria directa de los fondos europeos de recuperación. También se incluye un listado con los proyectos prioritarios, como la línea 3 del metro, la conexión entre Santa Justa y el aeropuerto, la culminación de la SE-40 o la Ciudad de la Justicia.
Empleo
Esta materia se recoge en dos estrategias diferentes. Una, con iniciativas que creen puestos de trabajo, que contempla medidas como la simplificación de trámites, la digitalización de expedientes y el impulso del uso de las declaraciones responsables. La segunda estrategia se refiere a la creación de planes especiales de empleo por parte del Estado y la Junta para los más vulnerables.
Modelo productivo
Esta estrategia, con hasta 68 medidas, abarca desde la atracción de nuevas empresas de la industria verde y los servicios avanzados a la retención del talento mediante modelos de coliving; el centro de emprendimiento de las Naves de Renfe; y un Consejo Municipal de Emprendimiento.
En cuanto al turismo, medidas como la lucha contra las viviendas turísticas ilegales o la digitalización de la oferta. Y en el ámbito cultural, potenciar la oferta en los barrios o el apoyo a pequeñas librerías.
Cambio climático
Entre las iniciativas más significativas de este eje del plan destaca la optimización inteligente del alumbrado público, la rehabilitación energética de viviendas y edificios o un programa concreto de peatonalizaciones.
Ciudad digital
Las medidas de esta estrategia se encaminan hacia la Smart City mediante, por ejemplo, la instalación de sensores en las calles para procesar la información de la ciudad.
Área metropolitana
Los planes acordados abarcan más allá de la capital, con una estrategia que contempla la elaboración de un plan estratégico de escala metropolitana, mejoras en la movilidad sostenible de este área y planes de movilidad de los polígonos.